Cochabamba.— El expresidente de Bolivia, Evo Morales, se defendió ayer ante el escándalo que lo involucra en el supuesto abuso de una menor de 15 años en 2015, cuando era presidente, y aseguró que se trata de una “mentira” que ya investigó la justicia, sin hallar nada en su contra.
Desde Cochabamba, su fortín político, y rodeado de seguidores, Morales respondió a César Siles: “No puedo entender qué clase de ministro de Justicia tenemos, sabiendo que este caso está cerrado, porque no hubo nada, es mentira”.
Denunció que hay cuatro procesos judiciales en su contra, uno de ellos por trata, tráfico y estupro, y que el gobierno de Luis Arce quiere “extraditarlo” a Estados Unidos.
El ministro de Justicia, César Siles, reveló el jueves que Morales tiene “un proceso abierto”, con “una investigación en curso”, por presuntamente haber abusado de una menor de edad.
Aseguró que “producto de esa violación [la adolescente] engendró a una niña, y el padre reconocido en un certificado de nacimiento (es) el señor Evo Morales Ayma”.
La fiscal del departamento de Tarija, Sandra Gutiérrez, informó el miércoles que ordenó la aprehensión del expresidente el pasado 26 de septiembre, pero que fue destituida después de que la justicia dejó sin efecto la resolución
Al respecto, Miguel Tapia, quien sustituyó a Gutiérrez en el cargo, señaló que la fiscalía sigue investigando a Morales por el mismo caso, pero bajo una tipificación diferente de la de estupro.
“El delito que se ha tipificado y con el cual se ha dado inicio (...) es por trata y tráfico de personas”, dijo el nuevo fiscal de Tarija al canal Unitel, sin dar más detalles sobre el expediente abierto al expresidente, quien gobernó de 2006 a 2019.
Morales, primer mandatario indígena de Bolivia, ayudó a la elección de su sucesor, el exministro Luis Arce, con quien hoy libra una feroz pugna por el liderazgo del oficialismo y la nominación presidencial en 2025. Agencias