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Washington.— Los dirigentes demócratas reaccionaron con furia ayer a la conmutación de la pena de Roger Stone por el mandatario de Estados Unidos, Donald Trump.
La presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, lo calificó como un “acto de corrupción pasmoso”, y precisó que se deben avalar leyes para impedir que un gobernante indulte o cambie la sentencia de alguien que trató de protegerlo de la justicia.
Este viernes, el republicano conmutó el castigo de su antiguo confidente político Stone, interviniendo en un caso penal que fue central en la pesquisa sobre Rusia.
El líder de la Comisión de Inteligencia de la Cámara Baja, Adam Schiff, dijo que la medida fue una “ofensa al Estado de derecho y los principios de la justicia”. El titular del Comité Nacional Demócrata, Tom Perez, se preguntó si “hay algún poder del cual Trump no abuse”.
También el senador republicano Mitt Romney, de Utah, condenó el hecho: “Corrupción histórica sin precedentes: un presidente estadounidense conmuta la pena de un hombre condenado por un jurado por mentir para protegerlo”.
En unos días, Stone debía comenzar a cumplir una sentencia de cárcel de 40 meses por mentirle al Congreso, manipular a testigos y obstruir la indagatoria de la Cámara de Representantes sobre si la campaña de Trump se coludió con Moscú para ganar los comicios de 2016.
La acción pone de manifiesto la furia persistente del mandatario por la investigación del fiscal especial, Robert Mueller, y forma parte de una labor continua del presidente y su gobierno para reescribir la narrativa de una pesquisa que ha ensombrecido a la Casa Blanca desde que comenzó su administración.
Mueller defendió ayer la “alta integridad” de la pesquisa. “Todas las decisiones que tomamos en el caso de Stone, como en los otros casos, se basaron únicamente en los hechos y la ley, de conformidad con el Estado de derecho. Las mujeres y los hombres que llevaron a cabo estas investigaciones y enjuiciamientos actuaron con la más alta integridad. Cualquier afirmación en sentido contrario es falsa”, dijo.
Stone se iba a presentar en la cárcel el martes después de que una corte federal de apelaciones rechazó su intento por postergar la fecha; sin embargo, le dijo a The Associated Press que Trump le llamó el viernes por la noche para informarle que ya no iría. Aunque una conmutación no anula las sentencias de culpabilidad de Stone por delitos graves de la misma forma en que lo haría un indulto, le evita estar tras las rejas.