Santiago.— El presidente Andrés Manuel López Obrador firmó, junto a jefes de Estado y expresidentes de Chile y la región latinoamericana, el Compromiso de Santiago, el cual busca cuidar y defender la democracia ante amenazas autoritarias y la intolerancia.
En el marco de la conmemoración de los 50 años del golpe de Estado en Chile, Gabriel Boric, presidente de ese país, agradeció al liderazgo latinoamericano haber firmado esa carta y advirtió que las amenazas a la democracia no se limitan sólo a las fronteras nacionales.
Ante familiares de las víctimas de la dictadura, incluyendo la hija de Salvador Allende, el presidente que, en medio del golpe de Estado encabezado por el general Augusto Pinochet decidió suicidarse, Boric dijo que es falso que no haya habido alternativa en Chile que dar un golpe. “Siempre va a haber otra alternativa que implique más democracia y no menos”, dijo, acompañado por López Obrador, así como por los presidentes de Bolivia, Luis Arce; de Colombia, Gustavo Petro, y de Uruguay, Luis Lacalle Pou.
En breve entrevista con la prensa al término del evento, al cual también acudieron defensores de derechos humanos o figuras como el exjuez español Baltasar Garzón y la presidenta de la asociación Abuelas de la Plaza de Mayo, López Obrador confirmó que firmó la carta.
“Sí, sí, lo firmé”, respondió brevemente al retirarse.
Alicia Bárcena, secretaria de Relaciones Exteriores, calificó el Compromiso de Santiago como “una maravilla” y afirmó que el presidente López Obrador “se fue muy contento” por haberla firmado.
“¿A qué se compromete México?”, fue cuestionada. “Bueno, pues a continuar con la democracia. Somos grandes admiradores de Salvador Allende y de su legado porque fue el primer presidente socialista, elegido democráticamente y creo que es, como lo ha dicho el Presidente, fue un pacifista que trató por las vías electorales y pacíficas lograr una transformación”, dijo la canciller.
Al concluir su gira, López Obrador aseguró que a 50 años de haber muerto durante el golpe militar, Salvador Allende todavía gobierna con su ejemplo. “El profundo respeto, cariño que tenemos por el presidente Salvador Allende que aún gobierna con su ejemplo. Es el apóstol de la democracia de Chile y un símbolo de la dignidad de los servidores públicos en todo el mundo”, dijo en el Palacio de la Moneda.
Ningún representante de partidos de derecha asistió al acto en La Moneda. También se restaron de una declaración en favor de la democracia que firmaron Boric y los cuatro exmandatarios en democracia.
El partido de derecha Unión Demócrata Independiente (UDI) emitió un comunicado en el que aseguró que debido al “quiebre” institucional y social que, alegó, causó el gobierno de Allende “el 11 de septiembre se transformó en algo inevitable”.
En Santiago, la ceremonia tuvo varios momentos cargados de emoción, como el minuto de silencio a las 11:52, la hora exacta en la que La Moneda fue bombardeada por la Fuerza Aérea, hace 50 años.
Isabel Allende lamentó los “retrocesos” en Chile en este aniversario y exigió “memoria” y “justicia”.
“Esto no es para dividir a las personas, sino para entender que los hechos de violencia nunca deben ser permitidos jamás”, dijo una chiena a AFP.
También hubo un acto cultural, con presencia de artistas como Mon Laferte, que interpretó Manifiesto, canción de Víctor Jara, una de las víctimas de la dictadura. Por la noche se realizó una vigilia en el estadio nacional, convertido en centro de detención y torturas en la dictadura.
Con información de AFP