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El primer ministro de Ontario, epicentro de la protesta contra las medidas sanitarias contra el Covid-19 en Canadá, declaró este viernes el estado de emergencia en su provincia debido a las manifestaciones "ilegales" que se desarrollan desde hace dos semanas.
"Tomaremos las medidas que sean necesarias para garantizar la reapertura de la frontera. Y a los asediados residentes de Ottawa, les digo que nos aseguraremos de que puedan volver a la vida normal lo antes posible", dijo Doug Ford en una conferencia de prensa.
Ford dijo, reportó CBC News, que convocará al gabinete y "promulgará urgentemente órdenes que dejarán en claro que es ilegal y punible bloquear e impedir el movimiento de bienes, personas y servicios a lo largo de la infraestructura crítica".
"Esto incluirá la protección de los cruces fronterizos internacionales, las carreteras de la serie 400, los aeropuertos, los puertos, los puentes y las vías férreas. También incluirá la protección del movimiento seguro y esencial de los servicios médicos y ambulatorios, el transporte público, las carreteras municipales y provinciales, así como los peatones", dijo Ford.
“Las multas por incumplimiento serán severas, con una pena máxima de $100,000 y hasta un año de prisión. También otorgaremos autoridad adicional para considerar retirar las licencias personales y comerciales de cualquier persona que no cumpla con estas órdenes”.
Ford dijo el viernes que Ontario está "en camino de eliminar muy pronto casi todas las restricciones para las empresas como parte de nuestro plan de reapertura", y está trabajando en un plan para "eliminar el sistema de pasaporte de vacunas". "Esta es una gran noticia y una señal de lo lejos que hemos llegado juntos en esta lucha", indicó.
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rdmd
