Merón, Israel.— Una gigantesca estampida producida durante una peregrinación judía que reunió a miles de personas en el norte de Israel provocó “decenas de muertos” este viernes, anunciaron los socorristas.
La Magen David Adom, equivalente israelí de la Cruz Roja, había anunciado con anterioridad al menos 20 heridos en estado crítico, antes de revisar al alza el balance a “decenas de muertos” y decenas de heridos graves.
Jerusalem Post habló de 44 decesos; Haaretz dijo que eran al menos 38.
El primer ministro Benjamin Netanyahu describió lo ocurrido como un “gran desastre” y dijo que rezaba por las víctimas.
“Con gran ansiedad sigo los informes de Meron y rezo por la curación de los heridos”, tuiteó el presidente Reuven Rivlin.
En plena noche, las sirenas de las ambulancias ululaban cerca del monte Merón, escenario de la tragedia. Los socorristas anunciaron inicialmente que se había producido un hundimiento de un graderío para explicar los heridos, antes de hablar de una “estampida” gigantesca.
Se desconoce aún la causa exacta que causó el accidente. Podría haber sido por un escenario que se derrumbó, a lo que se habría añadido la aglomeración de gente en el área, concretó a EFE un portavoz del servicio de emergencias israelí United Hatzalah.
“Nuestros voluntarios en la zona explican que hubo un colapso debido al hacinamiento y las personas se cayeron unas encima de otras”, lo que provocó que muchos “huyeran del lugar” y se encontraran en una situación de mayor saturación, agregó.
Videos posteados en las redes sociales muestran a miles de personas brincando, amontonadas y después tratando de huir del caos. Decenas de miles de personas participaban en la noche del jueves al viernes en la peregrinación anual en el norte de Israel, en el mayor evento público en el país desde el inicio de la pandemia del coronavirus.
La peregrinación, que celebra la festividad judía de Lag Baomer, se realiza en Meron, en torno a la tumba de Rabí Shimon Bar Yojai, un talmudista del siglo II al que se atribuye la redacción del Zohar, una obra central de la mística judía.
Lag Baomer es una festividad alegre que conmemora el final de una epidemia devastadora entre los alumnos de una escuela talmúdica en esa época.
Las autoridades habían permitido la presencia de 10 mil personas en el recinto de la tumba, pero, según los organizadores, en todo el país se fletaron más de 650 autobuses, lo que supone al menos 30 mil personas. La prensa local estimó la afluencia en 100 mil personas. De acuerdo con la BBC, más temprano en el día, los funcionarios dijeron que no podían hacer cumplir las restricciones de coronavirus en el sitio debido a las grandes multitudes. Según los informes, la policía dijo que había arrestado a dos personas por interrumpir sus esfuerzos por mantener el orden antes de que ocurriera la estampida.
Después de medianoche, las llamadas a los socorristas se multiplicaron y seis helicópteros trabajaban en la evacuación de los heridos a los hospitales de Safed y Nahariya, dos ciudades del norte del país.
Dado que el sitio estaba tan densamente poblado, las autoridades de búsqueda y rescate dicen que tuvieron dificultades para evacuar a las personas atrapadas, menciona Haaretz.
Contactado por la AFP, el ejército israelí confirmó que había enviado helicópteros para socorrer a las víctimas.
La prensa israelí mostró la imagen impactante de una decena de cuerpos inertes alineados en bolsas de plástico rodeados de socorristas sobre una pista de asfalto.
Según la policía, que destacó a 5 mil agentes para garantizar la seguridad del evento, se produjeron atascos gigantescos en las carreteras que conducen al norte del país.
La Magen David Adom había informado con anterioridad de que numerosas personas habían sufrido desmayos debido al calor y otras, quemaduras por las fogatas que se encienden ritualmente.
“Me acababa de sentar a comer cuando escuché los gritos; nos apresuramos a ayudar, y luego vimos los cuerpos. Al principio eran alrededor de las 10. Ahora, hay muchos más”, dijo Avi, un testigo que ayudó a atender a los heridos, indicó Haaretz.
“Sucedió en una fracción de segundo; la gente simplemente cayó, pisoteándose entre sí. Fue un desastre”, dijeron otros testigos. Dos personas le dijeron al medio que una barricada policial impidió que la gente saliera y provocó hacinamiento. “Pensé que iba a morir”, dijo un testigo al diario Maariv. “Vi gente muerta a mi lado”.
“Pensamos que tal vez había una alerta [de bomba] sobre un paquete sospechoso. Nadie imaginó que esto podría pasar aquí. El regocijo se convirtió en duelo, una gran luz se convirtió en una profunda oscuridad ”, dijo un peregrino que dio su nombre como Yitzhak a Channel 12 TV.
En 2019, un año antes de la pandemia que llevó a la cancelación de la peregrinación en 2020, los organizadores estimaron en 250 mil las personas que acudieron al lugar. Desde diciembre, más de 5 millones de israelíes (53% de la población) han sido vacunados con las dos dosis reglamentarias, en torno a 80% de la población de más de 20 años, según datos oficiales del país, que registró 838 mil personas contagiadas por el virus y 6 mil 300 fallecidos.