Una joven de Ohio , acusada de haber matado a su hija recién nacida en la casa de sus padres, tras su graduación, fue encontrada no culpable.
Brooke Skylar Richardson
, de 20 años, fue imputada por asesinato agravado y homicidio involuntario por la muerte en mayo de 2017 de su bebé, informa NBC News.
Sin embargo, fue hallada culpable de abuso del cuerpo de la menor y sentenciada a 3 años de libertad condicional. Si viola esa medida puede pasar un año en la cárcel. NBC dice que después de ese tiempo puede ser elegida para remover los cargos de su historial criminal.
El New York Post informa que durante el juicio la porrista se disculpó: "Lo siento. Puedo ser muy egoísta, pero estoy mejorando (...) Lo siento... por siempre". Su papá, Scott , abogó por ella en la corte. Dijo que había desarrollado un desorden alimenticio.
El juez Donald Oda la condenó, previamente, a siete días en la cárcel del condado. Durante el juicio declaró: "Si hubieras tomado decisiones diferentes, Annabelle [la menor] aún estaría viva. Tus decisiones antes, durante y después del nacimiento mostraron una indiferencia por la vida".
La mamá de su exnovio le reprochó: "No sólo perdí a mi primera nieta, mi hijo perdió a su bebé". Siguió: "Lo vi convertirse en una persona diferente. No quiero revelar su diagnóstico médico porque ella ha hecho suficiente. Ahora, cada 7 de mayo, en vez de celebrar una fiesta de cumpleaños, enviaré globos al cielo".
Los fiscales argumentaron que la porrista no tenía intención de quedarse con el bebé cuando dio a luz en medio de la noche. Fue acusada de matar a su hija y enterrarla en el patio de la casa de sus padres.
El fiscal Steven Knippen dijo que tras la muerte de la bebé, Brooke alardeó sobre su apariencia: "Después de matar a su hija y dejarla en la tierra, y no tener la decencia de cubrirla aunque sea con una manta, ella envió estos mensajes: 'mi abdomen volvió, mi abdomen volvió'". Los restos de la menor fueron hallados tras dos meses, indica NBC.
agv