Una corte antimafia de El Salvador condenó a penas de hasta 148 años de prisión a 56 pandilleros de la Mara Salvatrucha (MS13) por los delitos de extorsión, homicidio, conspiración para asesinar y agrupaciones ilícitas, informó este viernes el órgano Judicial.
Se trata de un grupo de pandilleros detenidos en una populosa comunidad de San Salvador, donde opera la célula "Harrison Locos Salvatruchos (HLS)".
Estas personas deberán pagar condenas de entre 2 y 148 años por los referidos delitos.
La fuente indicó que las mayores penas fueron impuestas a José Antonio Orellana y Kevin Alexander Lorenzo López, con 148 y 107 años de prisión, respectivamente.
Añadió que ninguna de las personas que recibieron condenas de entre dos y tres años de cárcel podrán cambiar sus penas por servicio público, dado que "ayudaron a extorsionar" a varias personas, principalmente comerciantes.
"El juzgador dijo en su fallo que se había comprobado que los condenados eran miembros de una pandilla" y que su "dominio territorial" abarcaba los municipios de San Salvador, San Marcos y Soyapango, todos del centro del país, sostuvo el órgano Judicial.
Detalló que también "quedó comprobado que los condenados tenían una línea de jerarquía en la pandilla y que se dedicaban a cometer ilícitos".
El Salvador es asediado por las pandillas MS13, que Estados Unidos busca erradicar, las facciones Sureños y Revolucionarios del Barrio 18 y otras minoritarias.
Estas bandas son responsables, según el Gobierno, de los índices de homicidios de entre 103 y 50,3 por cada 100.000 habitantes registrados entre 2015 y 2018.
Estas cifras colocan al país centroamericano como uno de los más violentos del mundo.
Las pandillas, un fenómeno considerado como herencia de la guerra civil (1980-1992) y que se fortaleció con la deportación de pandilleros de Estados Unidos, han resistido a los planes de seguridad implementados en las últimas cuatro Administraciones.
El Ejecutivo de Nayib Bukele, que asumió el poder el 1 de junio pasado, implementa un plan con el que busca recuperar el control de los territorios controlados por las "maras" en 17 localidades.