La neoyorquina Cindy B. fue una de las primeras en la puerta del cine AMC Empire 25 en Times Square este viernes, cuando reabrieron las salas de cine de Nueva York un año después de ser cerradas abruptamente debido al coronavirus.
"Por Dios, estoy tan emocionada de estar de regreso. ¡No estoy trabajando, así que preciso algo que hacer!", dijo a la AFP esta mujer de unos 60 años, antes de comprar una entrada para ver "Raya y el último dragón".
Los cines de la Gran Manzana reanudaron operaciones por primera vez desde el 17 de marzo del año pasado, cuando las autoridades decretaron su cierre a raíz del Covid-19 que comenzaba entonces a devastar la ciudad.
El gobernador Andrew Cuomo anunció el mes pasado que los cines podrán operar a 25% de capacidad -o un máximo de 50 personas por pantalla- a partir del 5 de marzo.
Ansiosa, Cindy llegó al cine a las 10:00 local, 30 minutos antes de que abrieran las puertas y una hora entera antes de que comenzara el filme.
Lee más:
"Soy fanática de las películas. Iba al cine una vez por semana, así que el año pasado casi me vuelvo loca", dijo esta mujer que no quiso revelar su apellido.
Pero no debía haberse preocupado tanto, ya que la sala, en tiempos normales repleta de turistas, estaba casi vacía.
"Creía que habría una larga fila. Pero supongo que mucha gente ya comenzó a trabajar", dijo Cindy.
El uso de mascarilla y la distancia social son obligatorias dentro de los cines. AMC ha instalado filtros de aire especiales y está desinfectando cada sala entre proyecciones.
Cindy dijo que no temía contagiarse el virus.
"Tengo dos mascarillas . Tengo pañuelos desinfectantes, tengo desinfectante de manos. ¡Tengo todo!", afirmó.
Roy Evans fue otro de los que esperó afuera en esta fría mañana la apertura de las puertas del AMC Empire 25, desesperado por volver a tener la experiencia de una película en pantalla grande.
"El último año me lo pasé tirado en el sofá, en casa, mirando televisión", dijo a la AFP este hombre de 68 años.
"Está bueno levantarse de esa silla e ir a un cine de verdad", añadió Evans, que se disponía a ver "Judas y el mesías negro".
Thomas Levesque, de 28 años, coincidió.
"Netflix es cool y todo pero no tiene esa atmósfera del cine y mi televisión no es tampoco una inmensa pantalla plana", dijo.
La reapertura parcial de uno de los mayores mercados de cine de Estados Unidos, cuando las salas de Los Ángeles permanecen cerradas, otorga cierto alivio a una industria muy golpeada por el virus.
El actor Liam Neeson tenía previsto agradecer en persona a quienes acudieran a una sala de Manhattan esta tarde.
AMC, que requirió fondos de emergencia por casi mil millones de dólares para evitar la bancarrota, está reabriendo sus 13 complejos multisalas en Nueva York.
Sin embargo, los dueños de cines más pequeños, independientes, aseguran que no es negocio abrir aún las salas.
Lee más:
"A una capacidad de 25%, es un desafío", dijo Andrew Elgart, que abrirá de manera progresiva sus salas en Brooklyn y Queens más tarde este mes.
La reapertura tiene lugar en momentos en que las autoridades flexibilizan gradualmente las restricciones en Nueva York, donde el virus ha matado a más de 29 mil personas.
Madison Square Garden dio la bienvenida la semana pasada a fans de la NBA y la NHL, mientras los teatros de Broadway y las salas de concierto podrán reabrir con capacidad limitada el 2 de abril.
"Este es definitivamente un paso hacia el retorno a la normalidad", dijo Cindy antes de sentarse en la sala.
lsm