La Paz.— El presidente Evo Morales se convirtió anoche en el virtual ganador, en primera vuelta, de los comicios del domingo pasado, un triunfo pendiente de ser proclamado formalmente por un órgano electoral, pero que de antemano es cuestionado por la oposición y por diversos países y organismos.
A 99.99% del recuento, Evo tenía 47.07 % de los votos, con 10.56 puntos de ventaja sobre el opositor Carlos Mesa. Morales necesita 40% de los votos con al menos 10 puntos de diferencia sobre Mesa para ser proclamado ganador, con lo que tendría 0.56% de margen sobre 36.51% del candidato opositor. El órgano electoral no había proclamado aún la victoria del presidente y el Tribunal Supremo Electoral informó que se repetirá la votación presidencial en cinco mesas de la región amazónica del Beni por irregularidades, lo que demoraría más el resultado final.
Mesa advirtió que no reconocerá el triunfo de Morales, quien obtendría así su cuarta victoria electoral consecutiva, porque, dijo, existe un “gigantesco fraude” a favor del mandatario. El opositor reclama una segunda vuelta, con el respaldo de organismos como la Organización de los Estados Americanos (OEA) y la Unión Europea (UE), y de los gobiernos de Argentina, Brasil, Colombia y Estados Unidos, ante las dudas sobre el proceso electoral.
En contraste, el subsecretario de la Cancillería mexicana para América Latina y el Caribe, Maximiliano Reyes Zúñiga, felicitó a Evo por su triunfo y le deseó “el mayor de los éxitos”. Venezuela hizo lo propio.
Morales acusó a la misión de observación electoral de la Organización de los Estados Americanos de calumniarlo al plantear las dudas sobre el conteo. “No quiero entender que la misión de la OEA ya está con el golpe de Estado”, dijo Morales, quien se declaró dispuesto a un balotaje. Las dudas sobre los resultados han derivado en manifestaciones y para hoy se convocó a paro en ciudades como La Paz, sede del gobierno y del Legislativo.