Dos comités del Congreso estadounidense informaron que quieren realizar nuevas investigaciones sobre el escándalo por el uso de un correo electrónico privado por parte de la ex candidata demócrata Hillary Clinton. Además, se informó que ella y su partido financiaron la investigación sobre el presidente Donald Trump y Rusia.
“Las decisiones tomadas por el Departamento de Justicia en 2016 derivaron en una gran cantidad de preguntas relevantes que deben ser respondidas”, señalaron los congresistas Bob Goodlatte y Trey Gowdy, quienes anunciaron una investigación conjunta de los comités de Justicia y de Vigilancia de la Cámara de Representantes.
Los legisladores quieren saber cómo se manejó el escándalo y por qué no hubo sanciones contra Clinton por el uso de una cuenta privada de correo electrónica cuando era secretaria de Estado (2009-2013).
Los republicanos cuestionaron al entonces director del FBI James Comey por no haber presentado una acusación contra la política demócrata. El presidente Donald Trump finalmente despidió a Comey en mayo. Además, los congresistas quieren saber por qué el FBI dio a conocer sus investigaciones sobre Clinton, pero no las que se llevaban adelante por los presuntos vínculos de la campaña de Trump con funcionarios rusos.
The Washington Post informó ayer que la ex candidata y los demócratas financiaron la indagatoria sobre el magnate y Rusia. El rotativo capitalino, que cita fuentes conocedoras del asunto bajo condición de anonimato, publicó que el Partido Demócrata y la campaña de Clinton contrataron a través del abogado Marc E. Elias los servicios de la firma Fusion GPS de Washington para la pesquisa.
Fusion GPS, a su vez, subcontrató al ex espía británico del MI6 Christopher Steele, socio de la empresa de inteligencia Orbis Business Intelligence, quien elaboró el dossier, no verificado, en cuestión. Los demócratas contrataron a Fusion GPS en abril de 2016, aunque la investigación sobre Trump y Rusia había empezado meses antes financiada por un donante republicano cuya identidad se desconoce y que después se retiró cuando el millonario ganó las primarias.
La campaña de Clinton y el Partido Demócrata financiaron la investigación de Fusion GPS al menos hasta octubre del año pasado, días antes de las elecciones que ganó Trump contra todo pronóstico. El despacho de abogados Perkins Coie, para el que trabaja Elias, recibió 5.6 millones de dólares de la campaña de Clinton y 3.6 del Partido Demócrata, de acuerdo con The Washington Post.
El dossier elaborado por Steele se filtró finalmente en enero, poco antes de que Trump jurase el cargo como nuevo presidente de EU.