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Washington.— La congresista demócrata de Estados Unidos Rashida Tlaib anunció ayer que no viajará a Israel, en un nuevo episodio del desencuentro que las legisladoras del llamado Escuadrón mantienen con el presidente Donald Trump, y en el que se ha visto envuelto el Estado israelí.
“He decidido no viajar a Palestina e Israel, esta vez. Visitar a mi abuela bajo estas condiciones opresivas para humillarme le romperá el corazón”, dijo en un comunicado Tlaib, hija de palestinos y representante por Michigan.
Destacó que los esfuerzos para silenciarla con un tratamiento que le haga sentirse poco valorada no es lo que su abuela quiere para ella: “Mataría una parte de mí que siempre permanece en contra del racismo y la injusticia”, indicó.
Estas palabras se producen después de que Israel revocara su decisión de vetar la entrada de Tlaib e informara que iba a permitir a la congresista, de credo musulmán, acceder al país para visitar a su abuela nonagenaria en el pueblo de Beit Ur al-Fauqa, en Cisjordania.
Muftiyah Tlaib, la familiar de la demócrata dijo estar “orgullosa de ella”, indicó el New York Post.
El gobierno israelí había prohibido el jueves la entrada de Tlaib y de la también congresista demócrata Ilhan Omar, musulmana y nacida en Somalia, por defender el boicot a Israel, tras presiones de Trump.
Al final, el Ministerio de Interior israelí, que encabeza Arie Deri, aprobó la petición de una visita humanitaria de Tlaib y reveló que la legisladora envió una carta la noche anterior al titular de esa cartera.
En la misiva, Tlaib prometió “cumplir las peticiones de Israel, respetar los límites impuestos a su visita y dijo que no promovería el boicot contra Israel durante la misma”, según un comunicado oficial difundido por el diario Haaretz.
En un principio, Tlaib tenía intención de viajar a Israel junto a Omar este domingo y se esperaba que la legisladora de origen palestino se quedara unos días más en Cisjordania, hasta que Trump apareció en escena.
En un gesto sin precedentes, el presidente estadounidense instó a las autoridades israelíes a vetar su entrada, lo que hicieron a los pocos minutos: “Israel mostraría una gran debilidad si permitiera la visita de las representantes Omar y Tlaib. Odian a Israel y al pueblo judío, y no hay nada que pueda decirse o hacerse para que cambien de opinión”, tuiteó Trump.
Más tarde, al ser cuestionado por los periodistas sobre si habló directamente con el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, Trump apuntó: “No quiero comentar sobre con quién hable, pero hablé con gente ahí, sí”.
Y continuó con sus críticas a Omar y Tlaib. “Quieren hacer boicots. Han dicho cosas horribles sobre los judíos. Han dicho cosas horribles sobre Israel y los israelíes. Creo que sería terrible, francamente, para Israel permitir a estas dos personas, que hablan tan mal de Israel, entrar”, subrayó.
Además, el mandatario dijo que la mayor beneficiada de la renuncia de la congresista demócrata Rashida Tlaib a viajar a Israel es la abuela nonagenaria de la legisladora, porque así “no tendrá que verla”.
No es la primera vez que Trump arremete contra las congresistas.
En julio, el mandatario acusó a Tlaib, Omar, Alexandria Ocasio-Cortez y Ayanna Pressley, todas ellas legisladoras del ala más progresista del Partido Demócrata, de odiar a EU e Israel, y les urgió a regresar a los lugares de donde vinieron, pese a que tres de ellas nacieron en territorio estadounidense.
En un mitin el jueves en Nuevo Hampshire se escucharon voces desde el público gritando que mandara a Omar de vuelta a Somalia, cuando Trump la nombró. Según el diario The Washington Post, que cita a funcionarios de la administración, los asesores del presidente tienen puntos de vista distintos sobre cómo tratar con las cuatro legisladoras progresistas que integran el Squad (Escuadrón).
Algunos ayudantes le han aconsejado que se centre en Omar y Tlaib al ser las que causan más polarización y tener peores resultados en las encuestas, mientras que otros han manifestado su preocupación ante la posibilidad de que se le vuelva en contra su oposición al viaje a Israel de las dos congresistas.