Más Información
Denuncian agresión de presuntos militares contra trabajadores en Tamaulipas; una de las víctimas falleció, tenía huellas de tortura
Diputados avalan súper secretaría de García Harfuch; SSPC investigará delitos y coordinará inteligencia a nivel nacional
Elección judicial: Aspirantes a cargos comparten carta de motivos y hasta currículum; “Justicia no debe ser inaccesible”, afirman
Yasmín Esquivel defiende la reforma judicial en Con los de Casa; alejado de la realidad pensar que es una venganza política, afirma
México hablará con Trump sobre el T-MEC en febrero; no es obligación del país tener órganos autónomos, afirma Ebrard
Con prórroga o sin ella, elección judicial va, asegura Taddei; afirma que presupuesto de 13 mmdp no es ninguna “ocurrencia”
Así fingió “El Guacho” su muerte para vivir en Estados Unidos; su esposa es hija de “El Mencho”, líder del CJNG
Cola, u
n perro callejero de Bangkok, amputado de sus patas delanteras, ya vagabundea de nuevo gracias a prótesis hechas a medida, similares a las del campeón paralímpico sudafricano Oscar Pistorius .
La vida de Cola tuvo un dramático vuelco en un día de 2016, cuando un habitante del barrio donde merodeaba le cortó las patas delanteras de un sablazo por haber roído sus zapatos como si se tratara de un hueso.
Un jubilado británico, Johm Dalley, instalado desde hace años en Tailandia se apiadó del perro y se lo llevó al balneario de Phuket, sur del país, célebre por su playa de arena blanca.
Al cabo de un tiempo, Dalley decidió recurrir a una empresa local especializada en prótesis para humanos a fin de que fabricara un par de patas para Cola.
Estas prótesis livianas "le dan un mejor equilibrio" que un modelo anterior, más pesado, se congratula Dalley.
"Es increíble como los perros se adaptan rápido", dice entusiasmado Dalley que además de Cola tiene ocho perros más.
La mala pata de Cola trajo cola ya que Dalley decidió crear una asociación, "Soi Dogs" (soi en tailandés significa calle), dedicada a los perros vagabundos.
"Queríamos lograr unas prótesis que no fueran demasiado pesadas, un poco flexibles a nivel del pie", explicó Teddy Fagerstrom, el director sueco del laboratorio.
Paradójicamente, Fagerstrom espera que el caso de Cola -el primer perro en utilizar prótesis similares a la de los deportistas paralímpicos, según John- sensibilice a los tailandeses sobre la conveniencia de recurrir a las prótesis de alta tecnología en un país donde tiende a ocultarse la condición de minusválido.
lsm