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La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) exigió al gobierno de Estados Unidos que suspenda la ejecución por inyección letal del mexicano Roberto Moreno Ramos , prevista para el próximo 14 de noviembre en Texas .
“La CIDH insta a los Estados Unidos y en particular al Estado de Texas, a que respeten plenamente sus obligaciones internacionales en materia de derechos humanos”
, dijo la CIDH , órgano de la Organización de Estados Americanos (OEA) , en un comunicado.
Moreno Ramos
, natural de Aguascalientes , entró al corredor de la muerte en mayo de 1993, después de que un año antes fuera declarado culpable del asesinato de su mujer y dos de sus hijos, a quienes golpeó con un martillo. Sus cuerpos fueron encontrados tres semanas después enterrados bajo unas baldosas del baño de la casa donde residía en Progreso ( Texas ).
Durante varios años, varios abogados trataron de frenar la ejecución alegando que se violó el derecho internacional al no informar a Moreno Ramos de su derecho de contactar al consulado mexicano tras su arresto para solicitar ayuda legal.
“Los Estados Unidos deben revisar sus leyes, procedimientos y prácticas para asegurar que los extranjeros que son arrestados, encarcelados o que están bajo custodia en espera de juicio, o que son detenidos de cualquier otra manera en los Estados Unidos, sean informados sin demora de su derecho a la información sobre la asistencia consular y que, con la aprobación de la persona, el Consulado apropiado sea informado sin demora de las circunstancias del extranjero”
, instó la CIDH .
El caso ha sido tratado en muchísimas instancias, e incluso en 2004 llegó a la Corte de Justicia Internacional de La Haya . Ese Tribunal urgió a los EU que frenara la ejecución de una decena de mexicanos que por entonces estaban en el corredor de la muerte y revisara las sentencias para determinar si, en caso de que hubieran tenido acceso a ayuda consular, su caso hubiera cambiado.
Dos años antes, la CIDH ya había solicitado medidas cautelares a favor del mexicano. En 2005, el órgano de la OEA concluyó que los EU “eran responsables de violar los derechos a la igualdad ante la ley, al debido proceso legal y a un juicio justo con respecto a los procesos penales que llevaron a la imposición de la pena de muerte” .
Además, las apelaciones argumentaron en su momento que el juicio no fue adecuado ya que en ningún momento el jurado que le condenó tuvo conocimiento de los abusos que sufrió de niño, su disfunción cerebral, su bipolaridad o su bajo coeficiente intelectual.
Si finalmente se ejecutara a Moreno Ramos , la CIDH advirtió a EU que estaría cometiendo una “grave e irreparable violación” del derecho a la vida.
Tal y como recordó la Comisión , EU es actualmente el único estado miembro de la OEA que lleva a cabo ejecuciones a sentenciados a pena de muerte , algo que considera “un desafío crucial para los derechos humanos” .
agv
