Carabineros de Chile investiga cinco ataques contra templos católicos en menos de 24 horas en la capital, de cara a la visita del papa Francisco a la nación sudamericana del papa Francisco. En uno de los edificios afectados, los agresores dejaron un panfleto con una amenaza para el jerarca religioso: “Las próximas bombas serán en tu sotana”.
Funcionarios del Grupo de Operaciones Policiales Especiales (GOPE) trabajan en el municipio suroeste de Estación Central, alertados del hallazgo de un artefacto explosivo en una parroquia.
La bomba casera, que no detonó, fue instalada en la iglesia Jesús Maestro, con lo que sumaron cinco atentados en menos de 24 horas a templos católicos, lo que preocupa a las autoridades, en vísperas de la llegada, el lunes, del Pontífice a Chile.
De acuerdo a la información entregada por Carabineros, se encontró un bidón con acelerante, además de panfletos en rechazo a la visita de Jorge Bergoglio, del 15 al 18 de enero. La madrugada del viernes, tres artefactos explotaron en templos católicos de los municipios de Recoleta, Peñalolén y Estación Central, y otro fue hallado en el frontis de una iglesia capitalina.
“Papa Francisco, las próximas bombas serán en tu sotana”, decía un panfleto encontrado en uno de los edificios católicos afectados.
Según la Fiscalía Metropolitana Sur, la responsabilidad recaería en el denominado Movimiento Juvenil Lautaro, que estaría detrás de ataques similares a sedes políticas en noviembre y diciembre, en el marco de las elecciones presidenciales recién celebradas.
Además de los ataques a las iglesias, miembros de Andha Chile, movimiento que agrupa a deudores habitacionales, protestaron en la Nunciatura Apostólica, donde el papa Francisco se alojará en Santiago.
Sobre los ataques, la presidenta Michelle Bachelet consideró que “esto es muy extraño, porque no es algo que uno pueda identificar como un grupo específico”.
Tras una reunión de coordinación sobre la visita papal en el Palacio La Moneda, Bachelet declaró que el deber del Estado es garantizar la tranquilidad a los habitantes de las ciudades que visitará el Papa.
El arzobispado de Santiago, en tanto, manifestó en una declaración su dolor por los atentados, “que contradicen el espíritu de paz que anima la visita del Papa al país”.
Por su parte, el presidente electo, Sebastián Piñera, condenó a través de Twitter los atentados y afirmó que “el odio y la intolerancia no pueden primar por sobre el respeto y el Estado de derecho. Recibamos al papa Francisco con alegría y en paz”.
En tanto, una encuesta de opinión de la Corporación Latinobarómetro, una organización no gubernamental con sede en Santiago, indicó que Chile es el país de América Latina que tiene la peor valoración del papa Francisco y la menor confianza en la Iglesia.
En una escala del uno al 10, el promedio de valoración del Pontífice en América Latina es de 6.8, pero en Chile tiene una calificación 5.3.
Chile es también el país que menos confía en la Iglesia católica (36%). El promedio regional es de 65%.
El viaje del papa Francisco a Chile se ve afectado por el malestar en torno a la débil respuesta de la Iglesia católica a las denuncias de abusos sexuales de curas. La Iglesia chilena perdió credibilidad tras el escándalo del reverendo Fernando Karadima, a quien el Vaticano condenó en 2011 a una vida de “penitencia y oraciones” tras confirmar que había abusado sexualmente de varios fieles.
El papa Francisco reabrió las heridas en 2015, cuando nombró a Juan Barrios, uno de los protegidos de Karadima, como obispo de la diócesis de Osorno.