En medio de una oleada de protestas en contra del racismo en Estados Unidos, dos muertes inicialmente tildadas como suicidios han causado conmoción y desatado interrogantes.
En las últimas semanas, los cuerpos de dos hombres afroamericanos, Robert Fuller y Malcolm Harsch, fueron hallados colgados de árboles en dos ciudades del sur de California (EU).
En los primeros anuncios, las autoridades apuntaron como posible causa de muerte el suicidio en ambos casos, pero ahora han abierto sendas investigaciones.
Esto luego de que las familias exigieran indagatorias tras haber expresado no estar convencidas de que hubiesen sido suicidios.
Unos 80 kilómetros y 10 días separan las muertes de Fuller y Harsch.
Los nombres de Fuller y Harsch resonaron ampliamente en las redes sociales durante el fin de semana y activistas del movimiento Black Lives Matter se unieron a las demandas de sus familiares.
Las características de los incidentes, además, han hecho recordar el terrible pasado de linchamientos de negros en EU a finales del siglo XIX y durante el siglo XX.
¿Qué se sabe?
Casi a las 4 de la madrugada del pasado miércoles, el cuerpo de Fuller, de 24 años, fue encontrado en las cercanías del ayuntamiento en Palmdale, una ciudad de 150 mil habitantes a una hora al norte de Los Ángeles.
"No había nadie en la escena y los paramédicos encontraron el cuerpo colgado de un árbol", explicó este lunes 15 de junio Daryl Osby, jefe del departamento de bomberos del condado de Los Ángeles.
Un transeúnte que vio el cuerpo contactó a las autoridades.
Se llevó a cabo una autopsia el pasado viernes 12 cuyos resultados están todavía por anunciarse.
"Los reportes iniciales parecían ser consistentes con el suicidio, pero nos pareció prudente retroceder y continuar investigando", dijo Jonathan Lucas, jefe de la Oficina del forense del condado.
Lucas explicó que se habló inicialmente de suicidio por la "ausencia de evidencia" que indicase un posible homicidio.
De acuerdo a las autoridades, en los alrededores del lugar no había sillas ni otros artefactos y solo se encontró "lo que llevaba en el bolsillo y la mochila", explicó este lunes Kent Wegener, a cargo de la unidad de homicidios de la oficina del alguacil.
Wegener detalló que se realizará un análisis forense a la soga, así como un estudio al tipo de nudo para determinar cómo fue hecho. De igual modo, investigarán si "hay material de video de cámaras de vigilancia o de casas" que hayan capturado lo sucedido y revisarán el celular del joven.
Las autoridades dijeron que investigarán también el historial médico de Fuller, quien tenía asignado a un trabajador social del estado, aunque se desconoce el motivo.
El domingo, funcionarios del gobierno de California exigieron que el fiscal general del estado realizara una investigación independiente del hecho.
Según lo dicho este lunes por el alguacil del condado, Alex Villanueva, la fiscalía general "va a monitorear y revisar nuestra investigación".
El funcionario también señaló que el FBI (Buró de Investigaciones Federales) será partícipe de la investigación desde la división de derechos civiles.
El viernes pasado, luego de que se hiciera pública la noticia de su muerte, residentes de Palmdale cuestionaron a las autoridades por haber informado en primera instancia que había sido un suicidio.
"¿Dónde están los videos de las cámaras de vigilancia?", "No confiamos en ustedes", "¿Por qué concluyeron que es un suicidio", interpelaron algunos al alguacil de la ciudad en medio de una tensa conferencia de prensa.
El sábado, la hermana de Fuller habló desde la plaza donde ocurrió el incidente y en el que se reunieron centenares de manifestantes.
"Queremos saber la verdad de lo que realmente sucedió. Robert era un buen hermano menor. Y es como si todo lo que nos han dicho no está bien… Escuchamos una cosa y luego otra, y solo queremos saber la verdad", reclamó Diamond Alexander.
"No tiene sentido… mi hermano no tenía tendencias suicidas", dijo.
Antelope Valley, la zona donde está ubicado Palmdale, "es conocido en el sur de California como un bastión de supremacía blanca y eso se remonta a décadas atrás", dijo la periodista de la emisora radial de Los Ángeles KCRW Cerise Castle, en un reporte de este lunes para la Radio Pública Nacional (NPR, por sus siglas en inglés).
"En 2016, hubo un incidente en el que tres hombres fueron acusados de un delito de odio tras atacar a un grupo de latinos en un parque. Esto fue un día después de que el Ku Klux Klan [un grupo extremo supremacista blanco] llevara a cabo un evento en la zona", explicó.
A una hora de Palmdale en dirección este, en la ciudad de Victorville, un grupo de bomberos acudió a la escena en la que Malcolm Harsch, de 38 años, había aparecido colgado de un árbol el pasado 31 de mayo.
De acuerdo al reporte de la oficina del alguacil del condado de San Bernardino, poco después de las 7:00, entró una llamada al número de emergencia 911 de parte de una mujer que reportó que su novio se había colgado.
Los paramédicos llegaron al lugar, que describen las autoridades como un "terreno" en el que hay un campamento de personas sin techo.
La mujer indicó que "ella y su novio, luego identificado como Malcolm Harsch, habían estado juntos durante la mañana, pero ella había vuelto a su carpa por un corto periodo de tiempo".
"Otros en el campamento le alertaron de que Harsch había sido hallado colgado de un árbol", que lo habían bajado de allí y estaban aplicándole maniobras de reanimación cardiopulmonar "para resucitarlo", indica el comunicado.
El personal de emergencia que arribó luego continuó sin éxito con los intentos hasta declararlo muerto.
La causa de muerte aún está por conocerse.
Las autoridades presentes en el lugar, incluido personal forense, indica el escrito, "no recogieron ninguna evidencia que sugiriera un posible homicidio".
Los familiares de Harsch, que viven en el estado de Ohio, dijeron en un comunicado el sábado pasado que encontraban difícil de creer que el hombre se hubiese suicidado, que "no parecía deprimido" y que "había conversado recientemente con sus hijos sobre verse pronto".
En el escrito, los familiares denunciaron que la autopsia se haya realizado "12 días después" de su muerte.
"Hay muchas maneras de morir, pero considerando las tensiones raciales actuales, que un hombre se haya colgado de un árbol definitivamente no tiene sentido en este momento. Queremos justicia, no excusas fáciles", dijeron.
Las autoridades de la ciudad informaron que harían públicos los resultados de la investigación una vez que se haya completado.
El alguacil del condado, John McMahon, dijo que su oficina estaba en contacto con el Departamento de Justicia del estado, que a su vez hacía un seguimiento de la indagatoria.