Washington.— La Casa Blanca expresó ayer su respaldo a un posible juicio con fines de destitución contra Donald Trump en el Senado, al considerar que es la única Cámara donde el presidente de Estados Unidos “obtendría justicia” en caso de que el caso salga adelante en la Cámara de Representantes.
Así lo dio a conocer el portavoz Hogan Gidley tras una reunión privada entre seis senadores republicanos y distintos altos cargos de la Casa Blanca, quienes hablaron de la posibilidad de que finalmente Trump sea sometido a juicio político, según The Washington Post.
En caso de realizarse, la Casa Blanca dice que sería un juicio de “no más de dos semanas” para no “generar daños” al presidente. “Trump quiere un juicio en el Senado porque es claramente la única Cámara en la que puede esperar que se haga justicia y recibir un proceso justo bajo la Constitución”, dijo Gidley en un comunicado.
Adam Schiff, el legislador demócrata a cargo de la investigación sobre la destitución de Trump, concluyó ayer mismo una serie de audiencias públicas asegurando que los hechos reprochados al actual presidente de EU fueron “mucho más graves” que los cometidos por el exmandatario Richard Nixon en la época del Watergate.
Trump niega haber presionado a su par ucraniano, Volodimir Zelensky, para que investigara al exvicepresidente Joe Biden y su hijo Hunter por corrupción a cambio de liberar ayuda militar. No hay otros testigos previstos y es probable que la Cámara Baja, bajo control demócrata, decida pronto acusar al presidente.