Berlín/Washington.— El presidente estadounidense, Joe Biden, proclamó ayer el “regreso” de la alianza transatlántica, en un potente discurso, con miras a restablecer a Estados Unidos como líder de Occidente contra lo que llamó un ataque global a la democracia.
La intervención de Biden en la Conferencia de Seguridad de Múnich, un evento anual celebrado por videoconferencia debido a la pandemia del Covid-19, coincidió con la bienvenida de la canciller alemana Angela Merkel al “multilateralismo” después de los años de confrontación del predecesor de Biden, Donald Trump.
En su primera gran alocución internacional sobre política exterior desde que asumió el 20 de enero, Biden dijo que los aliados tradicionales de Estados Unidos deberían volver a tener confianza en el liderazgo de Washington.
“Estoy enviando un mensaje claro al mundo: Estados Unidos ha vuelto. La alianza transatlántica ha vuelto”, afirmó desde la Casa Blanca. “Estados Unidos está decidido a volver a comprometerse con Europa, a consultar con ustedes, a recuperar nuestra posición de liderazgo confiable”, dijo el mandatario.
Biden, quien habló antes con líderes del Grupo de los Siete (G7), un club de países democráticos ricos, dijo que su gobierno enfatizará nuevamente la construcción de alianzas, en contraste con las políticas aislacionistas de Trump y el trato cáustico hacia los socios estadounidenses. “Nuestras asociaciones han perdurado y crecido a lo largo de los años porque están arraigadas en la riqueza de nuestros valores democráticos compartidos. No son transaccionales. No son para sacar algo”, dijo Biden en clara referencia al énfasis de Trump en redefinir a los aliados como rivales económicos.
La fuerza colectiva, dijo Biden, es la única forma de tener éxito cuando la contienda mundial entre democracia y autocracia está en un “punto de inflexión”.
“En demasiados lugares, incluidos Europa y Estados Unidos, se está atacando el progreso democrático”, dijo Biden. “Los historiadores examinarán y escribirán sobre este momento. Es un punto de inflexión. Y creo con todo mi ser que la democracia debe prevalecer”, mencionó.
Biden dijo que no busca un regreso a “los bloques rígidos de la Guerra Fría”, insistiendo en que la comunidad internacional debe trabajar unida en temas como la pandemia del coronavirus y el cambio climático, incluso si hay profundos desacuerdos.
El regreso de Estados Unidos al Acuerdo de París sobre el clima, que se formalizó este viernes, es una prueba de las intenciones de Washington, dijo.
“Ya no podemos retrasar o hacer lo mínimo para abordar el cambio climático”, dijo Biden, calificando este tema como una “crisis existencial global”.
Pero Biden hizo duras advertencias sobre las amenazas que, según dijo, plantean Rusia y China. “El Kremlin ataca nuestras democracias y usa la corrupción como un arma para intentar socavar nuestro sistema de gobierno”, dijo. El presidente Vladimir Putin “busca debilitar el proyecto europeo y nuestra alianza de la OTAN”, apuntó.
Biden dijo que “es mucho más fácil para el Kremlin intimidar y amenazar a estados individuales que negociar con una comunidad transatlántica fuerte y estrechamente unida”.
Urgió a los aliados europeos a unirse ante los retos políticos y económicos que plantea China, señalando que es posible “hacer frente a los abusos económicos y la coerción del gobierno chino que socavan los cimientos del sistema económico internacional (...) Las empresas chinas deben cumplir con el mismo estándar” que las empresas estadounidenses y europeas.
Respecto a Irán, Biden reiteró su compromiso de regresar a las negociaciones internacionales con Teherán sobre su programa nuclear, pero dijo que es necesario “abordar las actividades desestabilizadoras de Irán en todo Medio Oriente”.
El gobierno iraní pidió a Estados Unidos que levante todas las sanciones impuestas por el expresidente Trump.
En declaraciones a periodistas tras la cita del G7, la alemana Merkel saludó la llegada de Biden al escenario mundial.
En la conferencia de Múnich, Merkel hizo eco de la advertencia de Biden sobre Moscú. “Es muy importante que desarrollemos una política transatlántica hacia Rusia”, dijo.
El presidente de Francia, Emmanuel Macron, saludó la reaparición de Estados Unidos, pero dijo que Europa aún debe avanzar para garantizar su propia seguridad.