Washington.— El precandidato demócrata Joe Biden restablecería la protección para los inmigrantes indocumentados que llegaron a Estados Unidos cuando niños y aumentaría el número de refugiados que pueden ingresar al país si es elegido presidente, anunció ayer su equipo de campaña.
El exvicepresidente también prometió aumentar los recursos para tratar casos de asilo y que se dejará de separar a los padres de sus hijos en la frontera como parte de un nuevo plan migratorio presentado por sus asesores.
Biden es el favorito entre los demócratas para enfrentar al presidente republicano Donald Trump en las elecciones de noviembre de 2020. La inmigración ha sido un tema clave para el partido opositor en su rechazo a las políticas de Trump, entre ellas su promesa de campaña de construir un muro a lo largo de la frontera entre EU y México.
Biden también quiere trabajar con el Congreso para aprobar una ley que establezca cómo los millones de inmigrantes indocumentados pueden convertirse en ciudadanos estadounidenses, una aspiración de larga data de mandatarios de ambos partidos.
El político propondría asimismo un paquete de ayuda de 4 mil millones de dólares para El Salvador, Guatemala y Honduras.
En la misma jornada en la que el precandidato demócrata presentaba su propuesta migratoria, se informó que el servicio migratorio registró menos arrestos, pero más expulsiones durante el último año. El Servicio de Inmigración de Estados Unidos (ICE, por sus siglas en inglés) informó que en el año fiscal 2019 registró una caída de 10% de las detenciones de extranjeros, pero un alza de 4.3% de las deportaciones, entre las cuales aumentaron las expulsiones de familias.
Los oficiales del ICE, que tienen competencias en el interior del territorio diferentes a las de las patrullas fronterizas, arrestaron a 143 mil extranjeros y deportaron a más de 267 mil en el año fiscal 2019, que cerró en septiembre.
En este último año fiscal ICE expulsó a 5 mil 700 personas identificadas como unidades familiares, lo que representa un alza de 110%. Una gran parte de los deportados provenía de México, hacia donde fueron conducidas 127 mil 492 personas, una cifra que sin embargo representa una caída con respecto a las 141 mil 45 del año fiscal 2018. Los tres países del Triángulo del Norte de América Central también representan un importante peso en las estadísticas con 18 mil 981 salvadoreños, 41 mil 800 hondureños y 54 mil 919 guatemaltecos.
Detienen a médicos que querían vacunar a menores
En Chula Vista, California, médicos voluntarios a los que el lunes no les permitieron vacunar contra la gripe a menores migrantes en un centro de detención, dialogaron ayer sin éxito con autoridades fronterizas, a las que reclamaban de nuevo permitirles el ingreso.
La doctora Marie DeLuca, coordinadora de Doctores por el Cierre de los Campos (en referencia a que, según los galenos, los centros de detenciones son campos de concentración), dijo a EFE que tras la negativa de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP), su organización continuará diversas acciones en el país. La doctora hizo esta declaración luego de sostener durante cerca de dos horas una reunión con CBP y la Patrulla Fronteriza en el cuartel de Chula Vista, San Diego.
En el mismo recinto, la tarde del martes fueron detenidos durante más de una hora seis médicos que bloquearon la entrada a las instalaciones, en un acto de protesta porque se les impidió vacunar a los niños retenidos.