Nueva York.— La ex presidenta chilena Michelle Bachelet fue confirmada ayer como nueva alta comisionada de Derechos Humanos de las Naciones Unidas (ONU), y de inmediato el secretario general del organismo le advirtió que uno de los principales retos que deberá afrontar es el aumento “del odio y la desigualdad” en el mundo.
La Asamblea General aprobó la propuesta del secretario general de la ONU, António Guterres. Bachelet, quien fuera dos veces mandataria chilena, sucede así por cuatro años al jordano Zeid Ra’ad Al Hussein, que deja el puesto el 31 de agosto.
Bachelet, de 66 años, es una “pionera, una visionaria, una mujer con principios y una extraordinaria líder de los derechos humanos en estos tiempos difíciles”, sostuvo Guterres, quien destacó que ella misma sobrevivió a la “brutalidad” de un dictador chileno.
Pero alertó que Bachelet enfrenta un tremendo desafío al asumir el mandato en momentos en que “el odio y la desigualdad aumentan, el respeto por las leyes humanitarias y de derechos humanos declina, el espacio para la sociedad civil se reduce, la libertad de prensa está bajo presión”.
“Me siento muy honrada”, reaccionó Bachelet desde Santiago, en un video publicado en su cuenta Twitter. “Cumpliré con toda mi fuerza, con toda mi energía y mis convicciones con esa gran tarea que lo que busca es darle dignidad y bienestar a todas las personas”, aseguró.
Algunos discursos posteriores a la ratificación unánime mostraron algunas de las presiones que enfrentará la nueva alta comisionada. La ministra consejera estadounidense Stefaine Amadeo, en nombre del país anfitrión de la ONU, dijo que “le corresponde” a Bachelet evitar lo que Estados Unidos llama el fracaso del sistema de derechos humanos de la ONU, en particular “en Venezuela y Cuba”.
Peña Nieto felicita. El presidente mexicano Enrique Peña Nieto manifestó el respaldo del país al nombramiento de Bachelet. “Es un orgullo que una latinoamericana con la capacidad de @mbachelet ocupe esa importante responsabilidad. Cuenta con el respaldo de México”, tuiteó.
Luis Raúl González Pérez, presidente de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH), también celebró, a través de un comunicado, el nombramiento y subrayó que “este organismo refrenda su compromiso para colaborar con la alta comisionada en favor del respeto y de la protección de los derechos humanos, y continuar fortaleciendo los lazos de cooperación entre ambas instituciones”.
***Con información de Ricardo Moya