El vicecoordinador político del PT en el Senado, Miguel Barbosa, aseguró que en medio de la tragedia de los sismos de septiembre, la respuesta de los políticos ha sido equivocada, demagógica y oportunista; la reacción de los gobiernos estatales y federal ha sido insuficiente, populista y desorganizada.
“Hemos escuchado un sinnúmero de planteamientos, todos enfocados a ganar simpatías ante la tragedia; propuestas sólo de dientes para fuera, sin ninguna posibilidad ni voluntad para concretarse, el objetivo consiste en sobrevivir en este océano de rechazo a la clase política ”, dijo.
Expresó que en su opinión el Gobierno tendría que haber convocado a toda la sociedad a la construcción de un plan para enfrentar el desastre y no hacer anuncios de proyectos elaborados desde la soledad y soberbia del poder, sin la participación de la gente.
Después de este evento, indicó que el miedo del Gobierno, de los partidos políticos y de las organizaciones sociales privilegiadas -ésas que son funcionales al poder- es enorme ante la posibilidad de que surja una organización real de la sociedad mexicana que tenga la capacidad de asumir el poder.
Por eso el aislamiento a la gente para que no participe en la construcción y ejecución de un plan de acción para atender el desastre.
“Lo cierto es que el Estado mexicano está rebasado por la magnitud del siniestro; como siempre, después de la tragedia se evidencia la corrupción y la pobreza; un gran porcentaje de muertos y de daños a casas, edificios, monumentos, escuelas y en general a la infraestructura urbana, se generaron por corrupción y pobreza”, añadió.
Señaló que el planteamiento del Gobierno, de calcular en 38 mil millones de pesos el monto de la reconstrucción, es totalmente insuficiente y carece de respaldo técnico; pretender asignar 120 mil pesos a quien haya perdido su vivienda, 30 mil pesos para quien tenga que reparar daños estructurales y 5 mil pesos a quien sólo tenga que hacer reparaciones, “es una burla que generará una gran protesta social”.
lsm