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Moscú.- La aviación rusa interceptó dos bombarderos estratégicos B-1B estadounidenses en el mar Báltico, según informó el martes el Ministerio de Defensa.
Tras ser localizados por los radares rusos, dos cazas Su-27 recibieron la orden de despegar para impedir que los aviones estadounidenses violaran la frontera rusa.
Los Su-27 identificaron a los objetivos enemigos, dos bombarderos supersónicos Rockwell B-1B Lancer, que se acercaban a territorio ruso.
Tras la aproximación de los aparatos rusos, los dos aviones estadounidenses dieron la vuelta y se alejaron de la frontera de este país.
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Como en anteriores ocasiones, Rusia precisó que el comportamiento de su aviación está "en estricta consonancia" con las reglas internacionales del uso del espacio aéreo sobre aguas neutrales, y no incluyó una peligrosa aproximación a los aviones enemigos.
La semana pasada la aviación rusa interceptó también un avión espía RC-135 y dos cazas británicos en el mar Negro.
Además, el 6 de octubre un caza ruso MiG-31 interceptó un avión espía estadounidense Poseidon P-8A sobre el mar de Noruega.
Otro MiG-31 ya había interceptado un Poseidon el pasado 18 de septiembre cuando se acercaba a territorio ruso en el mar de Barents.
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mcc
