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Washington.— La oposición demócrata de Estados Unidos y la aparición de nuevas acusaciones de abusos aumentaron ayer la presión sobre Brett Kavanaugh, el nominado para el Tribunal Supremo del presidente, Donald Trump, un día antes de que una de sus supuestas víctimas testifique ante el Senado.
Un abogado difundió ayer la declaración jurada de una mujer que asegura que el magistrado estaba presente cuando varios jóvenes la violaban y que el ahora juez participó en abusos grupales durante una fiesta. “Aproximadamente en 1982, fui víctima de una de estas violaciones en grupo, o ‘trenes’; Mark Judge [amigo del juez] y Brett Kavanaugh estaban presentes”, dice la acusadora, Julie Swetnick, quien evitó pronunciarse sobre si alguno de los dos participó directamente en la agresión.
Ella se une a las dos mujeres que ya habían relatado distintos abusos de Kavanaugh: Christine Blasey Ford, quien afronta hoy una audiencia ante el Senado, y Deborah Ramírez.
Swetnick también dice haber sido testigo, entre 1981 y 1983, de “cómo Mark Judge, Brett Kavanaugh y otros provocaban que las chicas se emborracharan para que así estuvieran desorientadas, de manera que pudieran violarlas en grupo”.
Kavanaugh rechazó las nuevas acusaciones en un comunicado difundido por la Casa Blanca.
El propio Trump las tachó de “acusaciones falsas” y llamó “abogado de tercera” al representante legal de la tercera mujer que vincula a su candidato con abusos, Michael Avenatti, quien tiene entre sus clientes a Stormy Daniels, la actriz porno que mantiene abierta una batalla legal con el presidente.
La Casa Blanca difundió además una carta firmada por 60 ex compañeros y conocidos de Kavanaugh, en la que ponen en duda las acusaciones de Swetnick. “ Somos gente que conocía bien a Brett Kavanaugh durante el instituto... No tenemos recuerdo de haber conocido a nadie llamada Julie Swetnick en todo el tiempo que pasamos con Brett de forma colectiva”, reza la misiva.
Aun así, Trump dijo estar abierto a retirar la nominación de Kavanaugh.
“Siempre puedo ser convencido. Si pienso que él es culpable de algo así, sí, claro”, retiraría la nominación, declaró a periodistas.
Según un testimonio que obtuvieron medios de EU ayer, Blasey Ford, quien acusa al juez de haber intentado propasarse con ella hace 36 años en una fiesta escolar, dirá hoy ante el Comité Judicial del Senado que temió que Kavanaugh “iba a violarme. Traté de gritar para obtener ayuda”. Ella asegura que él estaba borracho y le tapó la boca con la mano para evitar que gritara y señalará que el hecho la dejó “drásticamente alterada”.
La oposición demócrata, que ha tratado de retrasar el proceso de nominación del juez desde el principio, redobló sus esfuerzos para descarrilar la candidatura de Kavanaugh y el líder demócrata en el Senado, Chuck Schumer, pidió que se retire su candidatura o que se posponga la votación hasta que el Buró Federal de Investigaciones (FBI) indague las acusaciones.
La líder de los demócratas en la Cámara Baja, Nancy Pelosi, cuestionó que se haya programado para el viernes el voto sobre la nominación de Kavanaugh.
