Un motín en una prisión en el centro de Ecuador dejó al menos 43 presos fallecidos, informó este lunes la Fiscalía.
“Hasta el momento se cuentan 43 internos fallecidos", indicó la Fiscalía en Twitter, señalando que la información está “en desarrollo”.
La cifra contrasta con la que dio poco antes el ministro del Interior, Patricio Carrillo, quien habló de 41 fallecidos.
“Lastimosamente 41 personas privadas de la libertad han perdido la vida en este incidente. La mayoría de ellos, por no decir casi el 100%, a simple vista se puede observar, fueron privados de la vida con arma blanca, no con arma de fuego”, dijo en rueda de prensa. Añadió que la mayoría de cuerpos “fueron expuestos y agredidos en los pabellones y en las celdas”.
Desde Israel, donde se encuentra de gira oficial, el presidente Guillermo Lasso aseguró que esta nueva revuelta es consecuencia de “la violencia entre bandas”.
Carrillo aseguró que “se evitó aproximadamente la fuga de 40 personas", quienes fueron recapturadas "inmediatamente" en los cercos externos de la prisión por efectivos de las Fuerzas Armadas y Policía.
En las prisiones ecuatorianas han muerto brutalmente 350 reclusos desde febrero de 2021 en medio de una violencia sin freno que el gobierno atribuye al enfrentamiento de bandas criminales vinculadas al narcotráfico.
Pese a múltiples medidas -que incluyen la asignación de presupuesto, el traslado de los reos más peligrosos a un solo centro y la creación de una comisión de pacificación- el gobierno de Lasso no ha podido frenar las masacres carcelarias, de las peores de Latinoamérica.
Ecuador enfrenta, además, un aumento de la violencia en las calles y del narcotráfico, que el gobierno intenta controlar mediante un estado de excepción en las provincias de Guayas, Manabí y Esmeraldas, las más golpeadas por el tráfico de drogas.
En lo que va del año, el país ha decomisado unas 82 toneladas de droga y en 2021 incautó el récord de 210 toneladas.
En los cuatro primeros meses del año, en el país se han reportado mil 255 muertes violentas -entre ellos decapitados y mutilados-, la mitad de lo registrado todo 2021.
Este último amotinamiento empezó en la madrugada del lunes en el centro carcelario Bellavista, de la provincia de Santo Domingo de los Tsáchilas (Colorados), cuando se enfrentaron las bandas de "Los lobos" y una de sus facciones denominada "R7", según el ministro.
Lee también: En la cuna de Pablo Escobar, el tráfico y consumo de drogas se disparan
Con información de Agencias
agv