Kiev.— “Violaciones graves de la ley internacional”, “otra atrocidad horrible”. La ONU, Estados Unidos, Francia, Alemania, Reino Unido... condenaron el ataque a una estación de tren donde se habían reunido al menos 4 mil ucranianos; murieron al menos 52 y 98 fueron lesionados en un ataque contra una multitud, en su mayoría mujeres y niños, que intentaban huir de una nueva ofensiva rusa en el este del país, dijeron las autoridades ucranianas.
El ataque fue “completamente inaceptable”, una “violación de la ley internacional de derechos humanos por las que los responsables deben rendir cuentas”, afirmó el portavoz de la ONU, Stéphane Dujarric.
La presidenta del Parlamento Europeo, Roberta Metsola, declaró a CNN que ese ataque y otros bombardeos son “crímenes de guerra internacionales cometidos contra personas soberanas que simplemente luchan por la democracia y por su país”.
El presidente de EU, Joe Biden, acusó a Rusia de haber cometido “otra atrocidad horrible”. Entre las víctimas mortales se contaban al menos cinco niños. El mandatario francés, Emmanuel Macron, anunció que su país estaba “recabando pruebas” sobre “crímenes de guerra rusos” en Ucrania. El primer ministro británico, Boris Johnson, anunció el envío de más misiles antitanques y antiaéreos a Ucrania. El canciller alemán, Olaf Scholz, denunció este “atroz” ataque.
El portavoz del Pentágono, John Kirby, dijo que, de acuerdo con las informaciones de que dispone, el ataque en Kramatorsk se trató de un bombardeo ruso con un misil balístico de alcance corto.
El general de división Kyrylo Budanov, jefe de inteligencia de defensa de Ucrania, dijo a Christiane Amanpour de CNN que las tropas rusas se “reagrupan” antes de avanzar hacia Kharkiv.
Zelensky denuncia “maldad, sin límites”
El presidente ucraniano, Volodimir Zelensky, declaró: “Esperamos una respuesta global firme a este crimen de guerra”.
El Kremlin negó su responsabilidad en la tragedia y denunció una “provocación” de Kiev. Frente a la estación se veían los restos retorcidos de un misil, sobre el que se podía leer (con letras blancas y en ruso) la inscripción: “por nuestros niños”. La frase, que suena a venganza, es usada a veces por los separatistas prorrusos para referirse a sus hijos muertos en la guerra del Donbás, que inició en 2014.
En Chernigov, el alcalde denunció que han muerto 700 personas, entre civiles y militares.
Rusia cerró las oficinas locales de Amnistía Internacional y Human Rights Watch (HRW).
Más dinero para armas
La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, y el jefe de la diplomacia europea, Josep Borrell, reforzaron en Kiev el total apoyo de la Unión Europea (UE) a Ucrania, a la que prometieron más dinero para armas.
Rusia está condenada a la “descomposición” de sus estructuras económicas, en tanto que a Ucrania le aguarda un “futuro europeo”, aseguró Von der Leyen. Prometió a Zelensky que su institución elaborará el informe sobre la candidatura para el proceso de adhesión de su país a la UE “en semanas”, una vez que responda a las preguntas del informe que ella misma le entregó en mano.
La UE impuso sanciones contra más de 200 personas, entre ellas las dos hijas adultas del presidente ruso, Vladimir Putin.