Madrid.— Las continuas críticas a España por parte del presidente Andrés Manuel López Obrador podrían tener efectos indeseados para la relación bilateral, a pesar de que ésta se halla muy consolidada.
“La relación hispano-mexicana a todos los niveles es de una fortaleza tal que resiste las críticas sistemáticas e infundadas de López Obrador. Pero, evidentemente, todo tiene un límite, nada es flexible de manera permanente”, señala a EL UNIVERSAL Carlos Malamud, investigador principal del Real Instituto Elcano y catedrático de Historia de América en la Universidad Nacional de Educación a Distancia (UNED).
“Si el presidente López Obrador insiste en ir en esa línea y se vence la capacidad y resistencia de la diplomacia y los empresarios españoles, y de la sociedad española en su conjunto, evidentemente que esto podría tener consecuencias no deseadas ni para el uno y ni para el otro. Sería muy perjudicial para las dos partes. España perdería, pero también México”, agrega.
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En la medida en que estas críticas provienen de la más alta magistratura de México, si se continúan y se extienden, esto evidentemente supone un riesgo, subraya el historiador
“López Obrador no da puntada sin hilo, sabe que está jugando con fuego. En términos políticos obtiene réditos con su política en general, incluida su relación sinuosa con la pandemia. Es parte de un todo que se integra en la cobertura político-ideológica a su Cuarta Transformación. Estas críticas [a España] son material para concitar apoyos políticos y movilizar a la sociedad en torno a su proyecto político”, indica.
El experto del Real Instituto Elcano considera, no obstante, que España no debe responder a las provocaciones de López Obrador.
“El descontento [en España] es generalizado, porque cada vez que llega una nueva crítica, provoca sentimientos en esa línea. Lo que ocurre es que una respuesta a ese nivel sería cargar de razón a López Obrador, crear un conflicto donde no existe, que es lo que él pretende. Su pretensión de rentabilizar el pasado, es absurda. Si en algo se tienen que poner de acuerdo España y México es en lo que respecta al futuro, y eso es algo que está descuidando López Obrador una y otra vez”, advierte el investigador,
Los cuestionamientos a España, ya sea por su desempeño histórico durante la Conquista o por las supuestas prácticas irregulares de algunas de sus empresas, están causando un gran malestar en distintos ámbitos del país europeo, porque nunca antes el comportamiento ibérico había sido tan señalado por parte de México.
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Las declaraciones de AMLO contribuyen a enfriar los ánimos de la diplomacia española e inquietan sobremanera a políticos y grandes empresarios, que son conscientes de que las relaciones bilaterales atraviesan su momento más delicado en las últimas décadas.
“Es evidente que las relaciones con España para López Obrador no son una prioridad. Tiene una única prioridad que es su Cuarta Transformación, y para fundamentarla recurre a la revisión de la historia en una actitud más propia de cuando él empezaba su carrera política que de la época actual, en la que ese tipo de planteamientos no tienen mucho eco, ni siquiera en el propio México. Me temo que no estamos atravesando el mejor momento en la historia de nuestras relaciones”, relata a este periódico un veterano diplomático que ocupó altos cargos en la administración española y que es un buen conocedor de México.
“Son críticas muy selectivas. México no ha sido un dechado de Estado de derecho, de transparencia y de buenas prácticas. La corrupción ha sido una seña de identidad durante muchos años. Ahora, que se ponga el foco en las empresas extranjeras y particularmente en las españolas que no han sido empresas golondrinas ni especulativas, sino que fueron a prestar servicios y a quedarse en el país, pues es evidentemente un trato discriminatorio”, agrega el exfuncionario que prefiere mantener el anonimato.
Las críticas de López Obrador desconciertan por partida doble a España, que considera a México uno de sus principales aliados y un socio estratégico en la región, además de que a nivel internacional ambos países se prestan con frecuencia apoyo mutuo o actúan de manera conjunta en defensa de sus intereses, especialmente en los grandes foros internacionales.
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