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Beijing.— La policía allanó el lunes el campus de la Universidad Politécnica de Hong Kong tras sitiarla toda la noche en un intento por expulsar a los manifestantes en su interior.
Agentes antidisturbios entraron en el campus sobre las 05:30 hora local y detuvieron a varios jóvenes que se habían atrincherado durante días en el complejo; hora y media después, el rector de la Universidad anunció que había llegado a un acuerdo con la policía para un “alto el fuego” a cambio de que los manifestantes dejasen de atacar.
No obstante, pasadas las 08:00 hora local, los agentes lanzaron gas lacrimógeno contra un numeroso grupo de estudiantes que había salido del campus, obligándolos a volver dentro. Los policías, supuestamente pertenecientes al cuerpo de élite conocido como Raptors, fueron recibidos con cócteles molotov, que causaron un gran fuego en la zona donde los manifestantes habían erigido barricadas, lo que provocó la intervención de los bomberos.
Aunque la policía niega que haya llevado a cabo una “redada” en la Politécnica, sino una “operación de dispersión”, los medios locales aseguran que se registraron varios heridos. Asimismo, el cuerpo confirmó que cerca de las 03:00 hora local un agente disparó fuego real hasta en tres ocasiones después de que una “banda de alborotadores” los agrediese tras detener a una joven de 20 años, a quien ayudaron a fugarse.
La policía había lanzado gases lacrimógenos y agua en varias ocasiones desde antes de la medianoche. Los manifestantes contratacaron con bombas molotov y flechas.
El uso de flechas, así como el lanzamiento de bombas de gasolina, representa un agudo incremento de la violencia por parte de los manifestantes, que intentan mantener la presión sobre las autoridades de Hong Kong.
Las protestas estallaron a principio de junio debido a una iniciativa para permitir la extradición de supuestos delincuentes al territorio continental de China. Los activistas dijeron que eso erosionaba la autonomía de Hong Kong y aunque la iniciativa se canceló, la furia continuó.
