Bruselas.— A pesar de su ineficiencia para materializar su voluntad, el daño que está causando el presidente Donald Trump al sistema político estadounidense podría ser duradero, indica un informe publicado por el Servicio de Investigación del Parlamento Europeo.

“Donald Trump rompió las reglas políticas y reinterpretó el papel del presidente de Estados Unidos como ninguno de sus predecesores”, señala el documento.

“El legado del presidente afectará muchas partes de la república”.

El estudio, titulado Global Trendometer, fue elaborado por un grupo de expertos para asistir a los eurodiputados en sus actividades legislativas.

El documento analiza retos emergentes de mediano y largo plazo, como el futuro de la democracia en la era de la inteligencia artificial y el uso de la geoingeniería como fórmula milagrosa al cambio climático.

El apartado dedicado a Estados Unidos expone cómo la administración Trump está alterando los equilibrios de poder del sistema político estadounidense, sus efectos y posibles consecuencias más allá de su mandato.

El documento sostiene que la cultura de conflicto promovida por Trump está generando índices de polarización no vistos desde la época de la reconstrucción, su admiración a las fuerzas armadas está dañando la imagen neutral de la institución y su desconfianza en los servicios de inteligencia y el Buró Federal de Investigaciones (FBI) amenazan la seguridad nacional.

La hostilidad hacia los medios de comunicación está ejerciendo enorme presión en el cuarto poder, los ataques a los miembros del Partido Republicano está debilitando el funcionamiento del Congreso y la elección de jueces con posiciones extremas y el descrédito público de aquellos que lo investigan está marcando el sistema judicial.

Como consecuencia, el documento estima que el Partido Republicano se verá afectado por un decenio o más allá; en tanto que el servicio público, incluyendo la diplomacia, los cuerpos de inteligencia y la Agencia de Protección Ambiental, sufrirán una pérdida de “knowhow” (capacidades o habilidades) superior al de una década. Muchos de los 4 mil cargos principales de la administración estadounidense aún no han sido cubiertos.

Contrario a lo prometido por el magnate, “el grupo de perdedores de la digitalización, automatización y globalización aumentará”.

Sin embargo, los daños pueden ser mayores: todo dependerá de la obtención de un segundo mandato (normalmente en la segunda fase los mandatarios son más eficaces en cambiar el país), si desencadena una crisis constitucional o en qué condiciones abandona el Despacho Oval.

El informe proyecta cuatro escenarios, clasificados con los nombres de terremoto, marea, infección y corrosión, y que van de menor a mayor daño.

El más peligroso sostiene que “la decadencia a largo plazo de EU requiere de un cambio institucional” y que de lo contrario lo que podría haber es “guerra civil o Estado fallido”.

El estudio realizado bajo supervisión de Daniele Réchard, de la Unidad de Tendencias Globales, advierte que “como muchos políticos populistas y “outsiders”, Trump parece ser ineficaz en la implementación de sus deseos, pero podría sentar las bases para “un déspota o reformador efectivo”.

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