Sloviansk.— Al menos 16 muertos y 59 heridos dejó un ataque ruso con misiles a un centro comercial en Kremenchuk, en el centro de Ucrania, un acto que los dirigentes del G7, reunidos en una cumbre en Alemania, calificaron de “crimen de guerra”.
Según la Fuerza Aérea de Ucrania, el centro comercial de Kremenchuk, “muy frecuentado”, fue atacado con misiles lanzados por bombarderos de largo alcance Tu-22 desde la región rusa de Kursk.
“Hasta ahora, sabemos de 16 muertos y 59 heridos, 25 de ellos hospitalizados. La información se está actualizando”, dijo el martes a primera hora el jefe de los servicios de emergencia ucranianos, Serguéi Kruk, en Telegram.
Rusia alega que este tipo de lugares suelen ser usados como depósitos de armas. Fue el argumento que usó cuando atacó un centro comercial en Kiev, en marzo pasado.
El presidente de Ucrania, Volodimir Zelensky, detalló que los “ocupantes dispararon un misil contra un centro comercial donde se encontraban miles de civiles. El [lugar] está en llamas y los equipos de rescate están luchando contra el fuego”.
En el mensaje publicado por igual en Telegram, Zelensky agregó un video donde se observa al centro comercial en llamas y envuelto en nubes densas, y camiones de bomberos fuera del inmueble.
El ejército ruso lanzó ayer otros misiles a territorio ucraniano y uno impactó en Lysychansk, ciudad aledaña a Severodonetsk, recientemente conquistada por las fuerzas de Moscú. Ocho personas perdieron la vida y 21 más resultaron lesionadas.
A petición de Ucrania, el Consejo de Seguridad de la ONU se reuirá este martes de urgencia para evaluar los últimos bombardeos rusos contra objetivos civiles en esta antigua república soviética, indicaron fuentes diplomáticas.
En Alemania, los líderes del G7 dijeron que “los ataques indiscriminados contra civiles inocentes constituyen un crimen de guerra” y condenaron lo que llamaron un “ataque abominable”. Advirtieron que habrá consecuencias para el presidente ruso, Vladimir Putin.
Rusia está por incurrir en un impago de su deuda externa por primera vez desde la Revolución Bolchevique en 1917. El domingo por la noche concluyó un periodo de gracia de 30 días correspondiente a un pago de intereses que venció originalmente el 27 de mayo. Pero la confirmación del impago podría tomar tiempo.
Moscú rechazó que esté en situación de impago, aunque admitió que, a causa de las sanciones internacionales, dos pagos no llegaron a sus acreedores antes de la fecha límite, el domingo.
“La no obtención del dinero por parte de los inversionistas no es resultado de que no haya habido un pago, sino que está causada por la acción de terceros, algo que no está directamente considerado (...) como un caso de impago”, insistió el Ministerio de Finanzas.
“Las afirmaciones sobre un cese del pago ruso son absolutamente ilegítimas”, recalcó el portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov.
Suscríbete aquí para recibir directo en tu correo nuestras newsletters sobre noticias del día, opinión, planes para el fin de semana, Qatar 2022 y muchas opciones más.