Más Información
Se inscriben 18 mil 447 para la elección del Poder Judicial; “Algo inédito e histórico”, dice Sheinbaum
Ataque en antro DBar fue por control y venta de drogas; se regulará horarios de centros nocturnos: gobernador de Tabasco
Claudia Sheinbaum felicita a Yamandú Orsi por su triunfo en Uruguay; “El Frente Amplio regresa a gobernar por voluntad del pueblo”
Vinculan a proceso a exfuncionarios del SAT; exmandos son acusados de atentar contra el fisco por más de 170 mdp
Roma.- Un grupo de activistas climáticos arrojaron un líquido que parecía barro contra la fachada de la basílica de San Marcos, en Venecia (noreste de Italia) para llamar la atención sobre que debido al cambio climático la famosa Ciudad de los Canales "quedará sumergida en el barro".
El grupo, formado por seis personas del colectivo "Ultima Generazione", utilizaron extintores para arrojar el líquido y después desplegaron unas pancartas con la frase "Fondo de Reparación", en referencia a las ayudas aprobadas por el Gobierno italiano para las localidades afectadas por las catástrofes naturales.
La Policía se llevó a los seis manifestantes para ser identificados mientras gritaban eslóganes para la eliminación de los combustibles fósiles, según los medios locales, algunos de los cuales indicaron que el líquido lanzado estaba mezclado en realidad con cacao.
Lee también ¿A partir de cuándo Venecia cobrará 5 euros a los visitantes?
"Venecia está condenada, debemos actuar ahora. Necesitamos un fondo de reparación", gritaron hacia la plaza, sosteniendo las pancartas.
"Estamos aquí para hacer sonar la alarma de incendio. Se trata de una protesta no violenta. Venecia es una ciudad que se está hundiendo y esto se debe a que nuestros gobiernos no han actuado contra la crisis climática", añadieron los activistas.
El presidente de la región Veneto, a la que pertenece Venecia, Luca Zaia, condenó esta acción al asegurar "que no es el camino correcto".
"Si realmente queremos plantear la cuestión, evitemos realizar manifestaciones como estas, que son absolutamente condenables", agregó
El alcalde de Venecia, Luigi Brugnaro, calificó el movimiento como un "gesto muy grave y vergonzoso". "Ya basta, es legítimo expresar su disenso, pero siempre respetando la ley y nuestro patrimonio cultural y religioso. Nuestra ciudad toma acciones concretas para proteger el medio ambiente. El vandalismo ciertamente no es el método correcto para encontrar soluciones”, escribió en la redes sociales.
Lee también Ven poca preparación ante cambio climático
mcc