Surfside, Florida.— Los socorristas que llevan 14 días retirando los escombros de un edificio en condominio derruido cerca de Miami pusieron fin ayer a la misión de rescate e iniciaron una de recuperación, indicando que las labores para encontrar sobrevivientes han concluido.

La alcaldesa de Miami-Dade, Daniella Levine Cava, declaró que “la transición del rescate a la recuperación [de cuerpos] se llevará a cabo a la medianoche de esta noche”. Dijo: “En este punto, realmente hemos agotado todas las opciones disponibles para nosotros en la misión de búsqueda y rescate”.

Levine Cava agregó que a las familias de las víctimas se les informó de la “decisión extremadamente difícil” más temprano durante el día.

“Por favor, únase a mí para orar por aquellos que hemos perdido y aquellos por los que estamos de luto”, dijo.

Horas antes de la medianoche, los rescatistas, funcionarios, rabinos y otros guardaron un minuto de silencio junto a los escombros.

De las 54 personas confirmadas muertas, 33 han sido identificadas y sus familias notificadas, dijo Levine Cava. Además, precisó que aún 86 personas permanecen desaparecidas.

El presidente estadounidense, Joe Biden, quien visitó el área la semana pasada, llamó para ofrecer su apoyo continuo, según la alcaldesa.

El anuncio se realizó luego de reportes cada vez más pesimistas de los funcionarios de emergencia, quienes señalaron que habían estado preparando a las familias para el peor desenlace.

El subjefe de bomberos de Miami-Dade, Raide Jadallah, les dijo a las familias en una conferencia cerrada al público el miércoles por la tarde que los equipos retirarían a los perros de rescate y los dispositivos especializados de sonido; sin embargo, seguirían buscando entre los escombros los cuerpos.

“Nuestra única responsabilidad en este momento es darles un cierre”, les dijo el subjefe de bomberos a los familiares, algunos de los cuales sollozaban.

Durante las dos semanas posteriores al derrumbe del edificio Champlain Towers, las autoridades insistieron en buscar sobrevivientes, una esperanza que se renovó luego de que los trabajadores demolieron lo que quedaba del edificio, el domingo pasado, lo que permitió a los rescatistas acceder a nuevas áreas de escombros. Había esperanzas de hallar huecos o espacios entre los restos donde alguien pudiera haber sobrevivido.

Sí había algunos de esos huecos, la mayoría de ellos en el sótano y en el estacionamiento, pero no se encontraron sobrevivientes. En lugar de eso, los rescatistas recuperaron más de una decena de cuerpos adicionales. Debido a que el edificio se vino abajo en las primeras horas del 24 de junio, muchas personas fueron halladas sin vida en sus camas.

Nadie ha sido rescatado con vida del sitio desde las primeras horas posteriores al desplome del edificio de 12 pisos. En dos ocasiones durante la operación de búsqueda, los rescatistas tuvieron que suspender la misión debido a la inestabilidad de la parte que quedaba en pie del edificio y también para que se efectuaran los preparativos de la demolición.

Después de que en un principio tenían esperanzas de que hubiera rescates milagrosos, las familias han empezado a prepararse poco a poco para las noticias de que sus parientes no sobrevivieron. “Para algunos, lo que nos están diciendo es casi una sensación de alivio cuando ya saben [que alguien ha muerto] y pueden comenzar a darle un cierre a ese capítulo y empezar a seguir adelante”, comentó Maggie Castro, bombera y paramédica de Miami-Dade, quien ha dado actualizaciones diarias a las familias.

Las autoridades están iniciando una pesquisa de un jurado investigador sobre el derrumbe. Las familias han interpuesto al menos seis demandas.

Naum Lusky, presidente de la asociación de condominios Champlain Towers North, dijo que los ingenieros contratados por la ciudad llegaron el martes para realizar tres días de pruebas en el edificio, que tiene un diseño similar y fue construido aproximadamente al mismo tiempo que Champlain Towers South.

“Están revisando de un extremo al otro y todo está bien”, declaró Lusky a The Associated Press. Desde que se derrumbó el edificio sur, ha insistido en que su torre es segura porque su asociación mantuvo el mantenimiento y no permitió que los problemas se agravaran.

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