San José. – Más de 10 millones de niños, niñas y adolescentes quedaron obligados a huir de sus hogares en 2023 por las 10 mayores crisis mundiales, con lo que el número global de menores de edad desplazados a la fuerza subió a 50 millones, se convirtió en el más alto de la historia y se duplicó desde 2010.
La dramática radiografía de la profunda crisis humanitaria está contenida en un análisis de Save the Children, institución internacional no estatal de defensa de los derechos de la niñez, del que EL UNIVERSAL tiene copia.
Las convulsiones se registraron en Sudán, Somalia, República Democrática del Congo (RDC), el territorio palestino ocupado, Turquía/Siria (terremoto), Afganistán, Myanmar, Ucrania, Etiopía y Sudán del Sur, precisó el reporte.
Lee también: Niño hace señas alusivas a la Mara Salvatrucha en su escuela y termina detenido en El Salvador
“Aunque las estadísticas son abrumadoras, un niño, niña o adolescente desplazado no es sólo un número”, dijo Gabriella Waaijman, directora humanitaria global de Save the Children.
“Es muy probable que ha sido testigo del tipo de violencia o destrucción que ningún niño, niña o adolescente debería ver jamás, antes de tener que dejar atrás todo lo que conoce. Cuando los niños, niñas y adolescentes pierden su hogar, lo pierden casi todo: su acceso a la atención sanitaria, la educación, la alimentación y la seguridad”, dijo.
La organización determinó que, de acuerdo con sus datos y el más reciente cálculo del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef por sus siglas en inglés), se pasó de 43 millones 300 mil niños, niñas y adolescentes que vivían en situación de desplazamiento forzado a finales de 2022 a más de 50 millones al cierre de 2023.
El nuevo estudio mostró en 2023 se estableció que unos 10 millones 500 mil niños, niñas y adolescentes más, a un promedio de unos 29 mil al día, fueron desplazados por primera vez dentro de su propio país o huyeron a otro, “siendo los niños, niñas y adolescentes de Sudán y Somalia los más afectados”.
“El número de personas desplazadas en todo el mundo ha alcanzado un nuevo récord”, según la Organización de Naciones Unidas. La más reciente precisión de la ONU reveló que 114 millones de personas fueron contabilizadas como desplazadas en octubre de 2023, recordó.
“Los niños, niñas y adolescentes representan alrededor del 40% de las personas desplazadas en el mundo, según la ONU, y millones se ven obligados a huir de sus hogares cada año. Esto deja a muchos sin poder ir a la escuela, sin comida suficiente, con escaso acceso a la atención sanitaria y en riesgo de sufrir abusos y violencia, además de necesitar apoyo psicosocial tras los acontecimientos de los que han sido testigos”, describió.
“Las dificultades económicas pueden obligar a los niños, niñas y adolescentes a dedicarse a actividades peligrosas, como la delincuencia, el trabajo infantil, la explotación sexual o la incorporación a grupos armados”, advirtió.
Lee también: Israel da a Hamas hasta el 10 de marzo para liberar a los rehenes en su poder
De acuerdo con las investigaciones, el número de niños, niñas y adolescentes desplazados aumentó significativamente en los últimos años y a un ritmo más rápido que el de adultos desplazados: más del doble desde los cerca de 20 millones 600 mil menores de 2010.
Al respecto, Waaijman describió que, en todo el mundo, una de cada 73 personas vive lejos de su hogar por el desplazamiento forzoso por conflictos o desastres relacionados con el clima, una proporción que “casi” se duplicó en los últimos 10 años.
“Los desplazamientos múltiples, en los que el mismo niño, niña o adolescente se ve obligado a abandonar su hogar una y otra vez, son tristemente la norma para mucha niñez y adolescente en lugares como Gaza, Siria y la RDC”, informó.
“Los desplazamientos afectan a los niños, niñas y adolescentes de forma distinta que a los adultos y constituyen una proporción cada vez mayor de los que se ven obligados a huir. Tenemos que actuar con urgencia y mantener los derechos de la niñez—que son los menos responsables de los conflictos y las emergencias climáticas que los desarraigan—en el centro de nuestras respuestas a los desplazamientos”, pidió.
Por otra parte, la organización recordó que apoya a los menores desplazados de todo el mundo “para darles los suministros vitales que necesitan para sobrevivir y las cosas que no se pueden meter en una bolsa: seguridad, educación, refugio, salud, un lugar donde jugar, reír y aprender, y alguien que luche por sus derechos”.
Save the Children desglosó el panorama en tres de los más graves de los 10 casos.
Sudán: Luego del estallido de fuertes combates armados en abril de 2023, sufrió el mayor desplazamiento de niños, niñas y adolescentes en ese ese año, con unos 4 millones 100 mil obligados a huir de sus hogares. La mayoría —unos 3 millones 200 mil— fueron desplazados dentro de Sudán, mientras que otros 850 mil lograron escapar a países vecinos, como Sudán del Sur, Chad, República Centroafricana y Egipto.
Somalia: El segundo mayor número de niños, niñas y adolescentes desplazados en 2023 se registró en Somalia por factores como inundaciones, sequía, conflictos políticos e inseguridad. Hasta un millón 600 mil menores se convirtieron en desplazados internos o externos en 2023, lo que elevó el número total de niños, niñas y adolescentes que debieron desplazarse a 2 millones 400 mil.
Territorios palestinos: Esas zonas quedaron entre los cinco lugares donde más se deterioró la situación en 2023. Unos 890 mil niños, niñas y adolescentes abandonaron sus hogares en Gaza a 21 de diciembre de 2023 tras el lanzamiento de las operaciones militares israelíes en respuesta a los ataques contra Israel del 7 de octubre anterior.
A finales de 2023, la proporción de población desplazada dentro de Gaza en sólo 10 semanas era una de las más altas registradas en todo el mundo.
El estudio incluyó el testimonio de un palestino —Shady, un nombre modificado para mantener el anonimato— de 40 años, agricultor del norte de Gaza y que huyó al sur con su familia cuando se intensificaron los bombardeos de Israel en respuesta a las acciones fueron ejecutadas por la agrupación terrorista palestina de Hamás.
“Ahora viven en una tienda de campaña. Una semana después de partir, consiguió por fin algunos artículos de primera necesidad para sus hijos, como mantas y ropa, pero el frío, la falta de alimentos nutritivos y las deficientes condiciones sanitarias son un desafío”, subrayó el estudio.
“Lo dejamos todo atrás. Todas nuestras posesiones, todo lo que tenemos, nuestra ropa y ropa de cama, todo se quedó atrás", narró Shady. “Durante el día hace calor dentro de la tienda. Y cuando llega la noche, hace frío. Hace un frío que pela hasta las 7 de la mañana. Nos acurrucamos con nuestra ropa y acurrucamos a nuestros hijos con nuestra ropa para entrar en calor”, relató.
vare