Más Información
Rosa Icela Rodríguez se reúne con próximo titular del INM; “arrancaremos el 2025 con mucho trabajo”, asegura
SSa llama a tomar medidas preventivas ante bajas temperaturas; pide proteger salud por temporada invernal
Oposición tunde diseño de boletas de elección judicial; “la lista definitiva la harán Monreal y Adán Augusto”, dice Döring
Padres de normalistas de Ayotzinapa marchan a la Basílica de Guadalupe; exigen cárcel para los responsables
3 de cada 10 veces que se vende bacalao en México es carne de otras especies: ONG; llaman a CONAPESCA a rastrear productos
Francia, vigente campeona del mundo, comenzó la defensa de su corona con un triunfo 4-1 frente a Australia, este martes en Doha, en un partido en el que Olivier Giroud igualó el récord de Thierry Henry como máximo goleador de la historia de los 'Bleus' (51).
Pese a que Australia se adelantó con un tanto de Craig Goodwin (9), los 'Bleus', que perdieron por lesión a Lucas Hernandez, remontaron con goles de Adrien Rabiot (27), Kylian Mbappé (68) y un doblete de Giroud (32 y 71). Suman tres puntos que les permiten liderar el grupo D mundialista tras el empate sin goles entre Dinamarca y Túnez, también este martes.
Del póker de grandes estrellas presentes en Qatar (Messi, Neymar, Cristiano y Mbappé), el francés era el segundo en actuar y lo hacía precisamente unas horas después de que su compañero argentino en el París SG sufriese en sus carnes la primera gran sorpresa del torneo: la derrota 2-1 de la Albiceleste contra Arabia Saudita.
Y el partido de los 'Bleus' comenzó con otro bombazo: apertura al costado derecho de Harry Souttar, Mathew Leckie se deshace de la marca de Lucas Hernandez con un gran control y su centro al segundo palo lo remata a la red Goodwin (9).
En esa jugada, además, el lateral francés se lesionó la rodilla derecha y tuvo que ser sustituido por su hermano Theo Hernandez. El jugador del Bayern Múnich abandonó la cancha en camilla y su lesión podría ser muy grave.
Afectados por estos dos reveses, a los 'Bleus' no solo no les costó reaccionar sino que cerca estuvieron de encajar un segundo tanto, en un duro disparo de larga distancia de Mith Duke (21).
Pero si de algo va sobrado esta selección francesa, pese a la baja de última hora de Karim Benzema, es de pegada, como si se tratase de un Mike Tyson con botas de tacos, capaz de mandar a la lona a cualquier rival que tenga delante.
Así dio la vuelta al marcador en apenas cinco minutos. Empató con un cabezazo de Rabiot a centro desde la izquierda de Theo Hernandez en una jugada que había comenzado con un córner sacado desde el otro costado por Griezmann (27).
Y poco después los 'Bleus' culminaron la remontada, en una jugada que comenzó con una pared entre Mbappé y Rabiot y el centrocampista de la Juventus, ausente en Rusia-2018 por una decisión de Deschamps, cedió a Giroud para que, desde el corazón del área, lograse a puerta vacía el 2-1 (32).
Era el gol 50 del veterano delantero galo (36 años), que quedaba a uno solo del récord absoluto de Thierry Henry. Y tiempo tenía por delante para intentarlo.
De nuevo Giroud (37) y Ousmane Dembelé (40) podrían haber dejado casi sentenciado el partido antes de la pausa.
Incluso Mbappé, activo pero muy discreto, falló un remate a bocajarro (45).
Los australianos, que tras los dos goles galos parecían noqueados, estuvieron cerca de marcharse al vestuario con el empate, pero el cabezazo de Jackson Irvine pegó en el palo (45+2).