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Texto: Staff Hemeroteca
Diseño web : Miguel Ángel Garnica
“Algún día la investigación médica encontrará un medicamento para curar el Sida, o una vacuna para prevenirlo”, era el eslogan de una campaña de salud que intentaba, sin gran éxito, frenar el avance de la epidemia de Sida en México.
El Sida es una de las etapas más avanzadas de la infección por el Virus de la Inmunodeficiencia Humana (VIH), de acuerdo con la Organización Mundial de la Salud. Este síndrome se caracteriza por disminuir la capacidad del organismo para combatir algunas infecciones y otras enfermedades.
El Síndrome de Inmunodeficiencia Adquirido (Sida) o también llamada "plaga del siglo XXI" cobró sus primeras víctimas en los años 80. Los primeros pacientes se diagnosticaron en Estados Unidos en 1981.
Varios activistas bloquean la entrada de la oficina de la Administración de Alimentos y Drogas de Rockville, en Maryland, Estados Unidos, para demandar mejores oportunidades para el tratamiento del Sida. Foto de la Agencia REUTERS de octubre de 1988.
La incertidumbre ante esta enfermedad dio lugar a diversas ideas en los 80, algunas estigmatizaron a parte de la población. En esa década todavía no se tenían las investigaciones de hoy día y la sociedad mantenía prejuicios con respecto a este padecimiento.
El caso del actor estadounidense Rock Hudson es un ejemplo de ello. Cuando se supo que la estrella de Hollywood estaba infectado con VIH, algunas celebridades exigieron que antes de cualquier escena romántica, sus parejas en la pantalla grande se sometieran a pruebas para descartar tener el virus.
El actor Rock Hudson, ídolo del cine norteamericano en los años 50. Foto: Especial.
Los síntomas eran característicos, en la piel de las personas afectadas aparecían manchas de color rosáceo, por ello la prensa llamó al Sida “peste rosa”, por lo que la gente la atribuyó a las personas homosexuales, según la Coordinadora de Asociaciones de VIH y Sida de la Comunidad Valenciana.
Tiempo después, los síntomas se hicieron notar en inmigrantes haitianos en Estados Unidos, en usuarios de drogas inyectables y receptores de transfusiones sanguíneas, por lo cual se pensó que la cercanía con estos grupos era un riesgo y sufrieron discriminación.
Su llegada a México
En México, la situación no era tan distinta. La plaga del siglo XXI llegó a México en 1983, cuando se notificaron seis casos de VIH en el país. Para 1989 había mil 583 casos, de acuerdo con cifras de Censida (Centro Nacional para la Prevención y Control del VIH/Sida).
Las ideas que se tenían sobre el VIH y el Sida en los años 80 fueron variadas. A finales de la década el Sector Salud lanzó una campaña llamada “Frente al Sida preservativo o condón, el nombre es lo de menos, lo que importa es que sirve para proteger vidas”.
Desplegado del 12 de abril de 1988 publicado en EL UNIVERSAL donde se habla de la historia del condón y se dice que “la palabra condón no debe considerarse como un término vulgar”.
Ésta mostraba la eficacia de usar preservativo para evitar este virus considerado “grave, incurable y mortal”. “El Sida no es un problema de moral. Es un problema de salud pública”, decía un anuncio publicado en este diario el 12 de abril de 1988.
El Consejo Nacional del Sida (Conasida) surgido en 1988, tenía como finalidad frenar la epidemia que había llegado a nuestro país cinco años antes. Fue en 1988 que un grupo de padres de familia se manifestó sobre la Avenida Paseo de la Reforma para exigir mejoras en la educación de sus hijos, pero también denunciaron al titular del Conasida (Consejo Nacional del Sida), Jaime Sepúlveda Amor. Según los padres, "(Sepúlveda) tiene una enfermiza obsesión para la promoción del condón como único medio para combatir el Sida".
Dijeron que el funcionario se olvidaba de la adecuada educación sexual "para que los niños y jóvenes aprendan a respetar a su tiempo y dentro del matrimonio, de su sexualidad, y no como el Conasida, que pretende que la padezcan enfermizamente los jóvenes a temprana edad".
Nota de EL UNIVERSAL sobre la marcha de padres de familia criticando las medidas tomadas por el Conasida, diciembre de 1989.
Ese mismo año, en la sección La Opinión del Lector de este diario, se publicó una carta del señor Marcos Hernández dirigida a Jaime Sepúlveda, donde argumentó que era mejor promover la abstinencia sexual y las relaciones sexuales hasta llegar al matrimonio.
"Se debe poner especial atención en los grupos de alto riesgo (homosexuales, lesbianas, prostitutas), brindándoles todo tipo de ayuda e invitarlos a alejarse de esa conducta permisiva y no dar armas (condones) para que se sigan suicidando", sostuvo.
En el espacio Columna del Lector, de este diario, se publicó una carta de un particular que criticaba las medidas sugeridas por las autoridades para evitar el contagio por Sida, en cambio él proponía la abstinencia sexual como la mejor solución.
Si bien las estadísticas muestran que la mayor parte de las personas infectadas con Sida son hombres que tienen relaciones sexuales con hombres, hoy se tiene registro de mujeres embarazadas y personas heterosexuales que también han sido diagnosticadas con VIH y Sida, según datos de 2018 de la Dirección General de Información en Salud.
Aun así, la comunidad LGBTTTI sufrió campañas de rechazo y exclusión cuando se creía que sólo ellos eran portadores del VIH en los años 80. En ese tiempo, grupos conservadores exigieron que se aislara a las personas enfermas para evitar la propagación del VIH.
El doctor Sepúlveda afirmaba "no hay grupos de riesgo, sino prácticas riesgosas" como se puede leer en una nota de diciembre de 1989 publicada en EL UNIVERSAL.
La doctora Alejandra Moreno Toscano inaugura una exposición y campaña informativa sobre Sida en el Metro, en diciembre de 1989, la acompañan Jaime Sepúlveda, director de Conasida; Norberto Treviño, director de Salud del DDF, y Gerardo Ferrando, entonces director del Metro. Foto: Archivo fotográfico EL UNIVERSAL.
En 1989 también se decretó el Día Mundial del Sida para que todos los gobiernos y la sociedad se unieran para hacer campaña en torno a temas relacionados con este padecimiento. El VIH se puede transmitir de varias formas. Una guía para saber si hay que hacerse la prueba de VIH es este cuestionario, difundido por la organización Positive Spin:
¿Has tenido relaciones sexuales con alguien que es VIH-positivo o cuyo estatus no conozcas? ¿Te has inyectado drogas y compartido agujas o jeringas con otros? ¿Has intercambiado sexo por drogas o por dinero? ¿Has sido diagnosticado por alguna Infección de Transmisión Sexual, como sífilis? ¿Has sido diagnosticado o estás en tratamiento médico por hepatitis o tuberculosis? ¿Has tenido relaciones sexuales con alguien que podría responder "sí" a cualquiera de las preguntas anteriores?
Imagen de un gigantesco condón frente al Palacio de Bellas Artes, sobre Avenida Juárez, como parte de las campañas de lucha contra el Sida. Noviembre de 1989. Foto: Archivo Fotográfico de EL UNIVERSAL.
En 2015 se inauguró en la Ciudad de México una clínica especializada para atención al VIH que lleva el nombre del doctor Jaime Sepúlveda. Desde los primeros casos en 1983 hasta junio de 2018, el Sistema de Vigilancia Epidemiológica de VIH/SIDA ha reportado 198 mil 598. La población de 30 a los 34 años es la más afectada, tanto en hombres como en mujeres, según la misma institución.
Su origen en la incertidumbre
“Ahora se piensa que el VIH se originó a partir de un virus similar encontrado en chimpancés...Se sabe que ciertos virus pueden transferirse entre especies”, escribe el especialista Eddy Martínez Zurita, quien colabora con una revista de divulgación científica de la Universidad Nacional Autónoma de México.
En 1999 un grupo de investigadores de la Universidad de Alabama estudió el virus de inmunodeficiencia simiesca (VIS), el cual afecta a los monos. Descubrieron que era casi idéntico al tipo de virus que más se ha difundido por el mundo, el VIH-1, con lo cual afirmaron que los chimpancés eran el origen de este padecimiento.
No hay un consenso en la manera en la que el virus pasó de los chimpancés a los humanos; una de las posibilidades considera que esto ocurrió por el consumo de animales infectados, o porque su sangre se introdujo en lesiones o heridas de cazadores alrededor de los años 30. Esta aproximación se determinó por la comunidad científica gracias a cálculos que permitieron inferir cuánto tiempo le ha tomado al virus “evolucionar” hasta su forma actual.
“Es probable que nunca se sepa realmente cómo, cuándo y dónde se originó el Sida. Los científicos que investigan las posibilidades, frecuentemente se aferran a su teoría individual...pero la diseminación del Sida podría haber sido producto de la combinación de muchos eventos, tanto naturales como de negligencia higiénica, médica o científica”, señala Martínez Zurita.
En agosto de 1995, un controversial poster con la imagen del papa Juan Pablo II fue usado para una campaña contra el Sida lanzada por el Consejo de Seguridad Británica. El mensaje decía: El onceavo mandamiento: Siempre llevarás un condón. Foto: Agencia Internacional AP.
Una de las razones de los científicos para determinar el origen del VIH es ampliar el conocimiento sobre el virus, pues entenderlo desde lo más básico podría ayudar a eliminarlo. Erradicar este virus es el sexto objetivo del milenio, una de las ocho metas principales de la Organización de las Naciones Unidas, junto con el fin del hambre o dar educación a toda la humanidad. La ONU tenía como fecha límite el año 2015 para cumplir todos los objetivos, pero la Organización Mundial de la Salud reporta que todavía 37 millones de personas viven con VIH en el mundo.
Los esfuerzos por erradicar el VIH y el SIDA vienen de todo el mundo. El pasado lunes 15 de octubre, la revista del Colegio de Médicos Estadounidenses Annals of Internal Medicine publicó una investigación de científicos españoles que podría acercarse al fin del virus que causa el Sida, después de que su estudio involucró el trasplante de células madre a pacientes con VIH y luego de eso, el virus fue indetectable en la sangre y tejidos.
Según el informe final, se encontró un “mecanismo que contribuye a una profunda reducción del VIH-1”; uno de los pacientes tratados es un caso de cura que no está entendido completamente porque involucra diversos mecanismos que todavía son estudiados. Esto no implica que el VIH haya sido eliminado.
El informe completo se puede consultar en la siguiente liga:
http://annals.org/aim/article-abstract/2707334/mechanisms-contribute-profound-reduction-hiv-1-reservoir-after-allogeneic-stem
En 2010 se notificaron 8 mil 479 casos de VIH en México. Hasta junio de 2018, se han reportado 3 mil 442. Aunque la reducción es notable, la discriminación y los estigmas todavía impiden que las personas se hagan pruebas de VIH, a pesar de que existen pruebas confidenciales y auto-pruebas. "Muchas personas solo se hacen la prueba después de enfermarse y presentar síntomas", dice un boletín del Centro Nacional para la Prevención y el Control del VIH/Sida.
La institución señala que "en un mundo ideal", todas las personas diagnosticadas estarían recibiendo un tratamiento médico. Sin embargo, existe un número importante de mexicanos que ni siquiera están en el registro epidemiológico o que no saben que tienen VIH. Queda un largo camino por recorrer.
Nuestra imagen principal es de septiembre de 1987. Es una toma de una campaña de la organización Movimiento de salud en defensa de la vida, en donde se observa a una brigada dando orientación contra el Sida a transeúntes que pasaban por el Jardín de la Solidaridad, sobre Avenida Juárez. Foto: Archivo Fotográfico EL UNIVERSAL.
La foto comparativa antigua es de julio de 1994, de un laboratorista haciendo pruebas contra el virus del Sida. En México había entonces más de 2 mil 400 enfermos. Archivo fotográfico EL UNIVERSAL.
La foto comparativa actual muestra a la doctora de origen español, María Salgado, una de las científicas involucradas en la reciente investigación sobre reducción del VIH, gracias al trasplante de células madre. La imagen pertenece al Instituto de Investigación del Sida IrsiCaixa, de España. Se puede conocer más información, aquí: http://www.irsicaixa.es/es
Staff Hemeroteca : Elisa Villa, Nayeli Reyes, Aída Castro, Dulce Moncada, Mariana Rojas, Alejandra Arriaga, Dafne García y Vanesa Conde.
Fuentes:
Hemeroteca y Archivo Fotográfico de EL UNIVERSAL
Boletín de la Detección del VIH en México, emitido por el Centro Nacional para la Prevención y el Control del VIH y el Sida
Cienciorama. Revista de divulgación científica de la Universidad Nacional Autónoma de México
Informe “Vigilancia Epidemiológica de casos de VIH/SIDA en México. Registro Nacional de Casos de SIDA”. Actualizado al segundo trimestre del 2018
Organización de las Naciones Unidas. Objetivos del Milenio
Organización Mundial de la Salud. Datos sobre VIH/SIDA
- https://www.injuve.cdmx.gob.mx/servicios/servicio/pruebas-rapidas-de-deteccion-de-vih
- https://www.facebook.com/MexicoAHF
- http://www.censida.salud.gob.mx/interior/prevencion/nueva/preguntas.html#uno