El ahuehuete del Paseo de la Reforma se encuentra “plenamente adaptado” y aunque no hay fecha para el retiro de las vallas que rodean al ejemplar, será la próxima administración la que decida cómo y cuándo se quitarán, afirmó Marina Robles García, (Sedema).

Aseguró que las lluvias de los últimos meses al ejemplar localizado en la rotonda a la altura de las calles de Río Rhin y Niza, por lo que la apariencia ladeada con la que se ha visto recientemente está relacionada con el peso de la humedad que recogen sus hojas.

“Sus ramas —cuando son jóvenes—, normalmente son ramas muy flexibles, y este tipo de hoja del ahuehuete recoge, cuando llueve, la humedad y pesa. Entonces, se ladea, pero los árboles son así, crecen, echan ramas por donde quieren echar ramas. Seguramente este ahuehuete, una vez que esté un poco más grande, los arboristas decidirán ordenar un poco sus ramas con podas”, señaló.

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A casi 16 meses de que se colocó el árbol que sustituyó a un primer ejemplar que fue retirado, la secretaria precisó que aún hay que darle más tiempo al árbol para que madure y posteriormente se podrá dar paso a su proceso de embellecimiento por medio de podas; mientras tanto, hay que seguir protegiéndolo de las condiciones externas como a cualquier ser vivo.

“Es un ahuehuete ya adaptado, el tiempo que tiene y la condición que muestra es de un ahuehuete plenamente adaptado, hay que seguirlo protegiendo de condiciones externas, porque como cualquier ser vivo, si alguien llega y lo quiere dañar, pues lo puede hacer, pero está muy bien”, afirmó en entrevista en el Museo del Ajolote de Chapultepec.

Respecto a la histórica palmera canaria que le dio nombre a dicha glorieta y que fue retirada en abril de 2022, debido a una plaga de hongos que debilitó su salud, al igual que con otras palmeras de la capital, Robles García precisó que se encuentra en un vivero tras un periodo de “saneamiento”, por lo que ahora sería un buen momento “para que grupos de artistas pudieran eventualmente levantar la mano”, y se realice alguna intervención con sus troncos, tal como lo planteó en su momento la administración capitalina.

En cuanto al primer ejemplar de ahuehuete que se plantó en la glorieta, el cual fue removido en marzo de 2023 debido a que nunca terminó de acoplarse a sus nuevas condiciones, precisó que aún se encuentra en proceso de readaptación en el Vivero Nezahualcóyotl, bajo supervisión de técnicos y especialistas, con la esperanza de que pueda sobreponerse.

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“Este tipo de árboles en términos de nuestra vida parece muy largo [el tiempo], pero en realidad en términos de su vida, un año es muy poquito para un proceso de readaptación y respuesta. Vamos a ver, ojalá que logre sobrevivir, por lo pronto ya tenemos un hermoso ahuehuete en la glorieta”, indicó.

El ahuehuete está bajo el cuidado de un equipo “custodio” de especialistas entre los que destacan agrónomos, biólogos y fitopatólogos, quienes han brindado atención al ejemplar desde su plantación en la icónica glorieta que ha sido punto de reunión para miles de capitalinos y que, incluso, ha valido el cambio de nombre de una estación del Metrobús.

A pesar de los inconvenientes y polémicas que generó el primer ejemplar, debido a que no se adaptó a las condiciones de la Ciudad y a manifestaciones que encabezaron colectivos y organizaciones que plantearon nombrar a este punto como la Glorieta de las y los Desaparecidos, actualmente este segundo árbol luce más atractivo a la vista, rodeado de plantas y flores.

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