Tras la gresca suscitada entre jóvenes clientes y operadores de las trajineras en Xochimilco, la calma regresó, los turistas se subieron a las embarcaciones y la venta de alcohol no se detuvo.
“Aquí es como es. La gente ya sabe que va a venir a echarse unas chelas, a ponerse borracho y a estar dos o tres horas en el agua, eso es todo, es Xochimilco”, comentó un operador, quien al mediodía del lunes se preparaba para una jornada más de trabajo.
También los turistas extranjeros siguieron llegando al embarcadero de Cuemanco. No reparan en pagar mil 200 pesos por dos horas de viaje o hasta los 3 mil 600 por el recorrido completo, que comprende aproximadamente seis horas.
Mientras, los paseantes locales sólo aprovechan las ofertas de 2x1 en caguamas micheladas en los locales del embarcadero.
“No, eso de las trajineras es para los extranjeros, a nosotros ni nos gusta. El agua está apestosa y todo ya es bien caro. Nosotros sólo venimos por las chelas y ya, que se paseen y se bailen a otros”, dijo uno.
Pese a que las autoridades han anunciado operativos de supervisión o los rondines de la policía ribereña de la Secretaría de Seguridad Ciudadana, ayer no se observó su presencia. Junto al lugar hay un destacamento de la Secretaría de Marina. En un recorrido realizado por EL UNIVERSAL se constató que no hay una sola patrulla ni personal que supervise los precios de bebidas y comidas. En algunos lugares un huarache oscila en los 200 pesos; en otros, la caguama michelada estaba en 150 pesos.
Los comerciantes del lugar tienen su versión.
Explicaron que en primera instancia los precios no son excesivos y que así cuestan, porque en ocasiones no es rentable el abrir todos los días, pues cuando la venta se recupera es sólo los fines de semana o en temporada de vacaciones.
La alcaldía Xochimilco informó que suspendió durante un mes la trajinera que se vio involucrada en una gresca el fin de semana.
De acuerdo con el alcalde José Carlos Acosta, a pesar de este incidente las acciones de vigilancia en los embarcaderos son constantes y en lo que va del año se han aplicado 14 sanciones por motivos como cobro excesivo, venta de bebidas alcohólicas, sobrecupo y, la última de ellas, por riña.
Cabe destacar que personal de la Dirección de Turismo, así como elementos de la Policía Auxiliar, Ribereña y Guardia Nacional, realizan recorridos en los canales, así como en las inmediaciones de éstos, para inhibir el consumo excesivo de alcohol y vigilar el cumplimiento de las tarifas oficiales.
Parte complementaria de estas acciones es la actualización del padrón de prestadores de servicios, gracias a lo cual se logró identificar de manera precisa a la trajinera involucrada.