A dos semanas de la explosión por acumulación de gas en el 1017 de la calle Providencia, colonia Del Valle, Maricarmen vive entre los escombros. Su casa es una de las tres afectadas y cercanas a la zona cero.
“Es el patio trasero de mi casa, aquí cayó prácticamente toda la otra casa, afortunadamente nadie de nosotras salió lastimada”, expuso.
La casa de Maricarmen colinda con la zona de la explosión. Su barda está a punto de derrumbarse y se sostiene por tres vigas de madera.
Han transcurrido 15 días desde que se registró la explosión por acumulación de gas que dejó una persona fallecida, desde entonces, “seguimos esperando a que la alcaldía nos dé respuesta y terminen las investigaciones y empiecen a sacar esto, sabemos y estamos conscientes de la temporada en la que estamos y esperemos ya no tarden más”, finalizó Maricarmen.
Adrián Segura habita otra de las viviendas afectadas. Durante las noches escucha el crujir del concreto, lo que en algún momento fue la habitación de su hijo, hoy está entre los escombros, por ello su familia se mudó con un familiar en lo que retiran los escombros, y exige atención de las autoridades.
Su hogar cuenta con el apuntalamiento de 20 polines de madera en las bardas colindantes, mismas que teme puedan caer en un sismo o en las maniobras de remoción.
Ayer, la secretaria de Gestión Integral de Riesgos y Protección Civil (SGIRPC), Myriam Urzúa, informó que a partir de la próxima semana se comenzará con la demolición de las viviendas afectadas por la explosión ocurrida el 22 de diciembre.
En conferencia de prensa, garantizó que también se dará atención a los vecinos que tuvieron afectaciones menores en sus viviendas, como vidrios y cancelería rota.
Precisó, suman 80 viviendas con algún tipo de daño, a quienes se les apoyará económicamente.