Temascaltepec, Méx.— Millones de mariposas llegaron a Piedra Herrada, uno de los cinco santuarios de la Reserva de la Biosfera de la monarca, en un espectáculo que llena como enormes racimos los árboles de oyamel, que usan como nido, luego de recorrer miles de kilómetros desde Canadá y Estados Unidos, señaló Ahimelec Villa Peña, décima regidora Temascaltepec.
Ante la pandemia por Covid-19, la comunidad náhuatl de San Mateo Almomoloa, en Piedra Herrada, se enfrenta a la disyuntiva de perder el único ingreso que tienen para sobrevivir, por temor al virus o recibir a los pocos turistas que llegan con protocolos de sanidad.
La pandemia mermó el número de visitantes que cada año llegan desde noviembre.
A Piedra Herrada cada temporada arriban más de 20 mil turistas norteamericanos, canadienses, chinos, japoneses y mexicanos. Esta vez no han acudido estadounidenses ni asiáticos, “y calculamos que si acaso vendrán 30% de los paseantes”, señalaron ejidatarios.
“Esta vez llegaron millones de mariposas, mucho más que el año pasado e incluso es la mayor migración que he visto en mis 32 años de vida”, afirmó Ahimelec, quien nació y creció en esta región boscosa. “Si los turistas se cuidan, cuidan a nuestros ejidatarios”, añadió.
Mientras siga el semáforo naranja en el Estado de México el santuario permanecerá abierto al turismo, pero si cambia a rojo el acceso quedará cerrado, porque no queremos exponer a los ejidatarios ni a los turistas, señaló la regidora.
Recibieron un curso de capacitación por parte autoridades del gobierno federal y estatal para fomentar un turismo responsable con uso de gel, cubrebocas y filtros de seguridad.