Un juez de Control vinculó a proceso a Julio César Serna, excoordinador de la Central de Abasto y exjefe de gabinete de Miguel Ángel Mancera, por el delito de enriquecimiento ilícito y permanecerá en el Reclusorio Norte.
En continuación de la audiencia inicial, la cual empezó a las 11:00 horas, el juez dictó seis meses para el cierre de la investigación complementaria.
También le rectificó la medida cautelar de prisión preventiva, por lo que el exservidor público permanecerá en el Reclusorio Norte durante su proceso.
Esta determinación se da luego de que el representante social adscrito a la Fiscalía para la Investigación de los Delitos Cometidos por Servidores Públicos formuló imputación correspondiente.
Durante la primera audiencia en su contra, el juez determinó la inmovilización de cuentas del exservidor público.
Julio César Serna fue aprehendido en la colonia Jardines del Pedregal, en la alcaldía Álvaro Obregón, por agentes de la Policía de Investigación (PDI), en cumplimiento de una orden de aprehensión.
Serna ocupó diversos cargos en la administración pública local, como Oficial Mayor de la Procuraduría General Justicia, director General de la Central de Abasto y coordinador General del gabinete en la jefatura de Gobierno de la Ciudad de México, puestos que probablemente utilizó para incrementar su patrimonio de manera injustificada y sin comprobar su legítima procedencia.
EL UNIVERSAL publicó el pasado 30 de noviembre que la Fiscalía General de Justicia (FGJ), como parte de la investigación para imputar por enriquecimiento ilícito y peculado a 23 funcionarios de la administración pasada, rastrea más de mil millones de pesos que supuestamente fueron desfalcados del Gobierno de la Ciudad de México durante la administración del actual senador Miguel Ángel Mancera, todo —de acuerdo con las indagatorias— orquestado por Julio Cesar Serna, actualmente detenido y bajo investigación.
Una de las principales líneas de investigación de los agentes para resolver este caso apunta a que aparentemente se crearon empresas fantasma, así como diversos prestanombres; primero para extraer el dinero de diversas dependencia de entre las que figuran el Invi, la Semovi e instituciones como la Central de Abasto (Ceda), e incluso de la Comisión para la Reconstrucción de Viviendas.