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“Venían a recoger un pedido cuando dispararon contra los venezolanos”, comentó un testigo del restaurante La Casa de Toño, ubicado en la colonia Anáhuac, en la alcaldía Miguel Hidalgo, donde la noche del jueves fueron atacadas tres personas, dos hombres y una mujer, de esa nacionalidad, uno de ellos era un delincuente que ya había sido detenido, perdió la vida por un disparo en la cabeza.
Cerca de las nueve de la noche del jueves, Sebastián Hernández se tomaba una cerveza en compañía de José Maximiliano y Manuela, el trío de origen venezolano, cuando sujetos armados irrumpieron al restaurante para accionar armas de fuego en su contra, para después emprender la huida a bordo de una motocicleta con rumbo desconocido.
“Venían por un pedido, entró uno con casco y se dirigió a la mesa de los venezolanos cuando dispararon cuatro veces, todos comenzaron a gritar y correr”, aseguró un testigo que pidió mantener el anonimato.
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Entre la confusión del tiroteo, los comensales se tiraron debajo de las mesas y otros tantos corrieron para pedir auxilio policial. José y su pareja se encaminaron rumbo a la salida del local, presentaba lesiones de arma de fuego en el cuello, brazo y pecho, y quedó tendido sobre la banqueta; mientras que Sebastián de 20 años quedó sentado en una silla de la mesa con el número 26, ya muerto por una lesión de arma de fuego en el cráneo.
Al lugar arribaron paramédicos quienes diagnosticaron sin signos vitales a Sebastián, mientras que su acompañante Maximiliano fue trasladado a un hospital donde hasta el último reporte se encuentra internado en terapia intensiva por las lesiones de arma de fuego.
Antecedentes
El venezolano que la noche del jueves fue ejecutado al interior de la Casa de Toño, ya había sido detenido en 2023 por la policía capitalina en febrero pasado, por robo a domicilio en Benito Juárez.
De acuerdo con los reportes emitidos en aquella ocasión, refieren que Sebastián ingresó a un domicilio ubicado en la calle Juan Sánchez Azcona y la avenida La Morena, en la colonia Narvarte. En aquella ocasión, dos mujeres de 36 y 45 años de edad lo seguían, luego de que saliera de su domicilio, informaron a los policías que el hombre había ingresado para robar.
En una rápida intervención, los oficiales le dieron alcance y le cerraron el paso al hombre de 18 años de edad, mismo que se identificó como ciudadano venezolano.
El ministerio público de la Fiscalía capitalina lo presentó ante un juez, sin embargo, logró su libertad, hasta que el jueves que sicarios lo ejecutaron en la colonia Anáhuac.
