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Naucalpan, Méx.— El cierre o clausura del relleno sanitario metropolitano de Tepatlaxco volvería a colapsar el sistema de recolección de casi mil toneladas de basura que genera este municipio, reconoció el secretario de Servicios Públicos, Carlos Trujillo Anell.
Esto además de las 500 toneladas que llegan de Atizapán de Zaragoza, confirmaron autoridades de este municipio mexiquense.
En este momento hay tres rellenos sanitarios y 20 tiraderos a cielo abierto en el Estado de México que están bajo procedimiento por diversas irregularidades al no cumplir la normatividad ambiental, informaron autoridades de la Secretaría de Medio Ambiente estatal, quienes se abstuvieron de dar la ubicación de los sitios hasta que concluyan los procesos de sanción.
El relleno sanitario de Tepatlaxco, que surgió como un sitio modelo luego de que en 2005 el cabildo y la Legislatura estatal autorizaron la concesión a 20 años del servicio de recepción y confinamiento de basura en el lugar donde inicialmente existía una planta de separación de residuos.
El vertedero recibió miles de toneladas de basura de Tlalnepantla durante un mes; además, cada día llegan entre 800 y mil toneladas de desperdicios de Naucalpan y 500 de Atizapán, confirmaron autoridades de ambos municipios.
Afectaciones al medio ambiente. Vecinos de la comunidad cercana al basurero Rincón Verde, señalaron la transformación que ha sufrido en los últimos meses el relleno sanitario de Tepatlaxco, donde ha crecido una montaña de más de 30 metros de altura que genera un río de lixiviados que contamina mantos acuíferos y un río que conduce agua del manantial Carrizales.
Al conocer del incumplimiento de la norma ambiental que regula la operación de rellenos sanitarios, el secretario de Medio Ambiente de Naucalpan ordenó una inspección al sitio.
Si Tepatlaxco cierra o es clausurado, Naucalpan volvería a vivir una crisis de acumulación de basura o un incremento en el costo por el traslado de residuos a otros confinamientos que se ubican en otros municipios, admitió Trujillo Anell.
Por ello, de forma emergente tras la inspección al sitio, el gobierno municipal pidió que se taparan las fugas de lixiviados.
Como segunda acción “se está realizando un saneamiento del sitio”. Un tercer paso es colocar un muro de contención, informó Carlos Trujillo.
En cuanto al talud o montaña de basura que genera olores pestilentes, el próximo fin de semana se iniciará la cobertura del mismo con tierra y tepetate.
