En medio de la emergencia sanitaria por Covid-19, delincuentes han adicionado un elemento al modus operandi de defraudar y extorsionar, pues a la presunta venta y renta de departamentos en diversas alcaldías como Cuauhtémoc y Benito Juárez le suman el elemento de la pandemia por coronavirus, que aqueja a miles de personas.
Ahora fingen tener un familiar enfermo de Covid-19 para que las víctimas depositen de inmediato el dinero por la oferta del inmueble; sin embargo, los departamentos no son entregados o, en otras ocasiones, están habitados y cuando se dan cuenta ya fueron estafados.
Esta nueva modalidad de fraude ha sido reportada al Consejo Ciudadano para la Seguridad y Justicia de la Ciudad de México en al menos cuatro ocasiones desde el año pasado y en lo que va de 2021.
En ellas, los delincuentes han referido tener un familiar grave de coronavirus y que por esta razón ofertan o rematan, a través de páginas web y redes sociales como Facebook, departamentos hasta 15% por debajo del precio valuado en el mercado.
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Las cantidades que han llegado a obtener los delincuentes van desde los 9 mil hasta los 25 mil 500 pesos, cifras que las víctimas han llegado a depositar, incluso, en diversas ocasiones.
Salvador Guerrero Chiprés, presidente del Consejo Ciudadano para la Seguridad y Justicia de la Ciudad de México, precisó en entrevista con EL UNIVERSAL que de 2020 a 2021 se han registrado 76 denuncias por fraude en las que delincuentes ofertan departamentos para renta o venta en zonas de alto valor y una vez que las víctimas realizan los depósitos, no vuelven a ser contactados por el presunto vendedor o arrendatario, e incluso se hacen pasar por agencias inmobiliarias. En este último caso no empleaban la excusa del familiar enfermo.
“El 87% de los fraudes fue por la renta de inmuebles; 13%, por la venta y, de todos ellos, 32% era por departamentos en pequeñas unidades de convivencia familiar, para aquellas personas que están en ese proceso”, explicó Guerrero Chiprés.
También, en la zona Centro de la Ciudad de México se han registrado casos en los que defraudadores ofertan un departamento, el cual presuntamente fue dejado como “herencia”, luego de que algún familiar muriera de coronavirus y manifiestan que su interés es venderlo lo más pronto posible, por lo que lo dejan a precios muy bajos.
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El 86% de las denuncias suceden en la Ciudad de México: 61% de las acusaciones son interpuestas por mujeres de entre 31 y 40 años que fueron engañadas mediante este mecanismo.
Guerrero Chiprés comentó que la pandemia ha originado que la delincuencia encuentre nuevas formas para cometer sus delitos, pero que continúan usando el mismo “guión” para enganchar a posibles víctimas, a pesar de que en diversas ocasiones se han hecho públicas estas formas de delinquir.
En la mayoría de los casos, los defraudadores también aprovechan el confinamiento a causa de la pandemia de Covid, pues, con esto como excusa, evitan el contacto con las víctimas y únicamente les comparten fotos para animarlas a realizar los diversos depósitos que solicitan.
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“[Hay] un predominio de contacto por internet y reducen al mínimo para este fraude, el contacto presencial, yo creo que eso es la novedad”, explicó.
En cuanto a la venta de inmuebles que terminan en fraude, comentó que primordialmente los defraudadores suplantan agencias inmobiliarias que presuntamente compraron derechos litigiosos, es decir, aquellos predios que se encuentran en un proceso jurídico.
Caen en el engaño
A través de una plataforma digital, un usuario solicitó un servicio de alquiler temporal en la página de internet Inmuebles 24, desde ahí lo canalizaron a un link de una aplicación que se dedica a la renta de este tipo.
Según un testimonio obtenido por esta casa editorial, al usuario le escribieron desde un correo electrónico y le solicitaron algunos datos personales para realizar el pago a una cuenta bancaria. Los defraudadores se hicieron pasar por un agente inmobiliario de dicha aplicación, por lo que la víctima hizo caso y continuó con el trámite que le indicaban.
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Fueron tres depósitos a la misma cuenta, con un total de 25 mil 500 pesos; sin embargo, el supuesto agente inmobiliario le pidió una imagen del comprobante de depósito y le indicaron que se iban a comunicar con él, lo cual nunca sucedió.
La víctima, al no recibir la llamada, se comunicó con la aplicación de renta, la cual de inmediato se desligó y refirió que había sido defraudado.