La diputada local del PAN, Claudia Montes de Oca, sostuvo que en la Ciudad de México existe un miedo justificado a que vuelva a ocurrir un sismo de magnitud considerable con efectos similares o más devastadores que los de 1985 y 2017, en cuyo caso no existen los mecanismos jurídicos, ni presupuestarios para hacer frente a las consecuencias en beneficio de la población afectada.
Exhortó al Senado a aprobar la Ley General de Gestión Integral de Riesgos y Protección Civil, a efecto de proveer un marco jurídico que garantice una atención eficaz, eficiente y coordinada ante desastres naturales.
Justificó que al eliminarse el Fondo de Desastres Naturales (Fonden), así como sus reglas de operación y el andamiaje jurídico que lo complementaban, los mexicanos están en mayor estado de vulnerabilidad e incertidumbre ante próximos y posibles desastres como incendios, sequías e inundaciones.
Para el caso concreto de la Ciudad de México, dijo, el Fonden representó un apoyo importante para el programa de reconstrucción tras el sismo de septiembre de 2017, ya que a través de él, en cumplimiento con sus objetivos y a partir de sus reglas de operación y procedimientos, se asignaron recursos para ayudar a la población.
Destacó que cuando el Fonden operaba, el apoyo financiero ofrecido a la Ciudad fue de más de 2 mil 600 millones de pesos, con los que beneficiaron a las 16 alcaldías en diferentes rubros.
Por ello es importante que para afrontar las consecuencias se requiere de políticas públicas, instrumentos preventivos y mecanismos jurídicos y presupuestarios claros para mitigar los riesgos de fenómenos y apoyar a las personas afectadas.