Un centenar de creyentes se dieron cita en el Templo de San Hipólito, en la colonia Guerrero, alcaldía Cuauhtémoc, para conocer la reliquia de San Judas Tadeo proveniente de El Vaticano, y dar gracias por los favores recibidos.
“Es una bendición conocer una parte del cuerpo de mi santo. San Judas es el santo patrono de mi familia”, dijo Diana, quien llegó junto a sus familiares.
Cerca de las cinco de la mañana, la figura de un brazo que contiene un hueso de una extremidad de San Judas, fue tras-ladado desde la Catedral Metropolitana al Templo de San Hipólito, bajo un operativo de seguridad. Y a las ocho de la mañana el recinto religioso abrió sus puertas a quienes ya esperaban sobre Paseo de la Reforma y avenida Hidalgo.
La señora Martina llegó desde la alcaldía Tláhuac, es devota del santo desde hace 15 años. Ella y su familia se encontraban en las playas de Acapulco, Guerrero, cuando una mantarraya la picó y fue internada, pero gracias a San Judas, afirmó, “volvió a nacer”.
“Vengo a darle gracias a mi San Juditas que me salvó la vida después de ser picada por una mantarraya, hoy quince años después vengo a darle las gracias”, comentó Martina.
Doña Georgina se formó por más de 20 minutos para pedir por su hijo, quien se encuentra cumpliendo una pena de 40 años en el penal de Santa Martha Acatitla. Acompañada por su nieto, fueron por la bendición del apóstol canonizado.
“Le ruego a Dios Padre que siga protegiendo a mi hijo quien está en la cárcel, que su luz lo ilumine y lo guíe siempre” dijo.
Los canes también fueron parte de los asistentes a la celebración religiosa. Connie y Güereja acompañaron a su dueña a conocer la reliquia.
“Venimos toda la familia desde la alcaldía Gustavo A. Madero para que nos siga colmando de sus bendiciones, más a las pequeñas del hogar, nuestras mascotas”, expresó Catalina.
La Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) desplegó un operativo con personal de la Policía Metropolitana y de la Subsecretaría de Control de Tránsito. Hubo una reducción de un carril a la circulación vehicular y los oficiales apoyaron en los cruces peatonales.
Pese a la lluvia, los asistentes hicieron largas filas, que incluso rodearon la plaza del recinto católico. Con sombrillas, imágenes, y algunas personas vestidas como el apóstol, los fieles esperaron su turno para poder observar, sólo unos segundos, la reliquia que permanecerá en San Hipólito hoy viernes.
