Tultepec, Méx.— La ruptura de un acueducto de 50 años de la Comisión Nacional del Agua (Conagua) afecta el suministro de agua potable para 600 mil habitantes del Valle de México, tanto de municipios mexiquenses como de las alcaldías Gustavo A. Madero, Venustiano Carranza y parte de Azcapotzalco, cuya reparación lleva 65% de avance, informaron autoridades de Conagua, por lo que el desabasto se prolongará varios días.
La ruptura de la infraestructura conocida como Los Reyes Ferrocarril dejó secas las llaves de las casas en los municipios de Tlalnepantla, Atizapán de Zaragoza, Tultitlán, Tultepec y Nextlalpan, informaron autoridades de Conagua, a través de personal del Organismo de Cuenca Aguas del Valle de México.
La reparación del tubo, cuya vida útil está al límite, se prevé realizarla en un lapso de 80 horas, contadas a partir del siniestro registrado el 8 de marzo, es decir, en tres días y medio.
Ayer, personal de una empresa especializada colocó dos tramos de tubo, de más de 5 metros de largo, por lo que iniciarían labores de sellado y pruebas para determinar que no haya fisuras.
Una vez que el acueducto —por el que cabe un hombre de pie— quede sellado, trabajadores empezarán pruebas e iniciará el llenado de tanques, por lo que se retrasará el servicio.
Las autoridades comentaron a EL UNIVERSAL que el fin de semana podría regularizarse el suministros en los municipios y alcaldías afectadas.
Esta infraestructura fue construida para abastecer de agua a los habitantes del norte del Valle de México y debió salir de servicio hace cuatro décadas con la llegada del Sistema Cutzamala, pero el crecimiento de la población hizo necesaria su permanencia, indicaron autoridades.
El agua proviene de una batería de 280 pozos ubicados entre Santa Lucía y Barrientos, en Tlalnepantla, por ello es que abastece a cientos de miles de habitantes del Valle de México.
El desabasto que generó la ruptura sería subsanado con el reparto gratuito de agua potable tanto en las alcaldías afectadas, como en los cinco municipios mexiquenses de esta región.
No obstante, al lugar del siniestro llegaban vecinos a solicitar agua en pipas para sus casas.
La tierra rugió y brotó el agua
La mañana del 8 de marzo, vecinos de Teyahualco, en Tultepec, sintieron y oyeron un tremor que provocó la ruptura del acueducto de Conagua, lo que generó no sólo el hundimiento de la calle 10 de Junio, sino que el afluente inundara 60 casas y negocios de la zona aledaña al mercado pirotécnico de San Pablito, reportaron autoridades de Tultepec.
Marco Antonio Cruz, alcalde de Tultepec, coordinó los trabajos para extraer agua, tierra y lodo que afectaron a más de medio centenar de familias y negocios. Solicitó a Conagua no sólo atender la emergencia, sino descartar el riesgo de una nueva ruptura, pues en la misma calle se registró una similar en 2016.
Personal de Conagua llegó al lugar el 8 de marzo y ha mantenido trabajos de estabilización, reparación y substitución de un tramo de más de cinco metros lineales de la tubería dañada de 72 pulgadas de diámetro, tal como lo atestiguó EL UNIVERSAL en un recorrido por la zona.