Toluca, Méx.—“¡Seguridad! No más robos, ni operadores asesinados por delincuentes!”, externaron cientos de choferes de camiones de carga que ingresaron al Valle de México por autopistas rumbo a la Ciudad de México.
La mañana del martes, cientos de camioneros de la Alianza Mexicana de Organizaciones de Transportistas AC (Amotac) llegaron a casetas de cobro de las autopistas México-Querétaro, y México-Pachuca, entre otras ubicadas en municipios mexiquenses del Valle de México rumbo a la capital del país, para exigir garantías de seguridad en su trabajo, en sus recorridos por las carreteras de la República.
Las caravanas avanzaron lentamente a menos de 20 kilómetros por hora por las carreteras de acceso a la CDMX donde cientos de camioneros externaron su rechazo a las extorsiones de policías federales, Guardia Nacional, estatales y municipales, especialmente en zonas críticas del Estado de México, como la autopista México-Querétaro en el municipio de Cuautitlán Izcalli.
El retiro de camiones articulados fue otra de sus demandas, así como que la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) no otorgue más permisos para unidades de doble remolque y reactive trámites comunes como placas, licencias y permisos, suspendidos durante la pandemia y que son motivo de extorsión.
Pidieron freno al incremento del precio de casetas y combustibles, entre una decena de temas que integraron en un pliego petitorio.
En la autopista México-Pirámides, un grupo de transportistas se concentró en la zona de Los Héroes para unirse a la inconformidad por supuestas extorsiones de autoridades federales y asaltos en carreteras.
Los transportistas se congregaron en el municipio de Acolman y de ahí avanzaron en caravana hacia la caseta de peaje donde colocaron sus vehículos que bloquearon tres de los cuatro carriles de la vía de cuota.
En el municipio de Ecatepec, cerca de 20 unidades de carga entre traíleres, torton, camionetas y autobuses de turismo que portaban cartelones con las leyenda: “Amotac Delegación Ecatepec mexiquense. Fuera los fulles porque causan accidentes y destrozan carreteras”, se estacionaron en carriles laterales de la Vía Morelos en ambos sentidos.
Los vehículos se concentraron en la unidad habitacional Los Laureles, muy cerca de la caseta de cobro de la autopista México-Pachuca, donde ocuparon dos de los cuatro carriles de la vialidad que conecta a la Ciudad de México y Pachuca, por lo que el tránsito vehicular comenzó a saturarse y obligó a los automovilistas a invadir el carril confinado del Mexibús.