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Pese a la pandemia por Covid-19 , integrantes de la Fuerza Amplia de Transportistas exigen al gobierno de la Ciudad de México un incremento de tarifa , mínimo de 2 pesos o algunas condonaciones, pues aseguran que a ellos también les ha afectado en la economía y temen que las rutas ya no puedan regresar a dar servicio.
“No quisiera politizar esta situación, creo que puede parecer insensible, pero regresaría una pregunta a la población y el propio gobierno de la Ciudad de México, ¿no se le hace insensible una situación en la que, en 27 años se nos ha otorgado un incremento solamente del 100% y que los insumos como la propia gasolina han tenido incrementos más de 1000%”, expuso el representante de los transportistas, Nicolás Vázquez.
Destacó que, en porcentaje, los transportistas capitalinos cobran una tarifa 46% inferior al resto del país y comparada con los del Estado de México, hay un decremento de 60%, por lo que consideraron urgente que la jefa de gobierno, Claudia Sheinbaum Pardo, se reúna con ellos y defina un acuerdo para mejorar su economía.
“Si hoy todavía existen microbuses y se encuentran en las condiciones que se encuentran, es por obra y gracia de los gobernantes. Cuando llegaron los gobiernos de la llamada izquierda, el parque vehicular con microbuses y combis tenía un promedio de cinco años. Pero ante el rezago de las tarifas, también se fue rezagando el cambio de unidades que ha servido para el discurso gubernamental, sobre que, si no renovamos el parque vehicular, no existe incremento de tarifa”, dijo.
Refirió que, sumado a la crisis económica resultante de la tarifa, con la pandemia su situación ha empeorado, a pesar de que el gobierno ha otorgado bonos de transporte, no han sido suficientes.
“A lo largo de los siguientes meses la movilidad de las personas se ha recobrado poco a poco, pero aún está lejana la cantidad de personas que transportábamos, y varias rutas y compañeros que trasladaban personas a los centros de trabajo, se han quedado sin pasaje, sin recursos económicos y muchos, sin empleo y, hasta sin su medio de trabajo por las deudas que tenían”, dijo.
Por ello, los transportistas dieron un ultimátum a las autoridades de la Ciudad de México para que, en lo que resta de febrero, atiendan sus peticiones “de manera seria, formal, sin dilaciones, y con respuestas congruentes a nuestras necesidades”.
“Ya estamos cansados de que nos den atole con el dedo. De lo contrario, el primer día de marzo comenzaremos las acciones, que serán dadas a conocer en su momento. Ya nos cansamos de mesas de diálogo, de mesas de trabajo, de reuniones que sólo sirven para entretenernos y nos desmovilizan”, finalizó aunque no detalló el tipo de acciones que llevarán a cabo, pues aún se están analizando.
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