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El Frente Amplio de Transportistas (FAT) mantuvo la amenaza de paralizar la capital del país el próximo 17 de septiembre, fecha del Primer Informe de Gobierno de Claudia Sheinbaum, luego de que ayer no llegaron a un acuerdo con autoridades, tras ocho horas de negociación.
“Deben tener muy claro [las autoridades] que lo de este martes [la manifestación] no es nada [a comparación] de lo que ocurrirá mientras rinde su informe de labores”, anunció Nicolás Vázquez Figueroa, vocero del FAT, que aglutina 45 organizaciones, con alrededor de 18 mil trabajadores, concesionarios y accionistas de microbuses y Metrobús.
Luego de la protesta hubo una reunión, donde tras nueve horas autoridades de las secretarías de Gobierno y Movilidad, y los transportistas del FAT acordaron llevar a cabo mesas de diálogo para resolver temas relacionados con el uso de tecnologías del transporte concesionado, la certeza jurídica por concesiones y el registro de operadores, además de los planteamientos para la sustitución de unidades del Metrobús.
“Escuchamos sus planteamientos, preocupaciones y demandas, pero también hemos puesto sobre la mesa el interés del Gobierno de contar con un transporte público accesible, seguro y moderno, en el que se contemplen nuevos esquemas de movilidad”, dijo Rosa Icela Rodríguez, secretaria de Gobierno.
Andrés Lajous, titular de la Secretaría de Movilidad (Semovi), expuso que no cederán con el aumento de tarifa, como los transportistas solicitaron: “Se mantuvo una diferencia sobre el tema, nosotros hemos expresado que en este momento el Gobierno no plantea un incremento”.
Caos.Por la mañana, a su llegada a la plancha de Plaza de la Constitución, Vázquez Figueroa reiteró que ante la insistente cerrazón de la administración de la Ciudad de México para establecer una mesa de diálogo en donde escuchen sus demandas, el día del Primer Informe de Labores de la jefa de Gobierno “paralizaremos la capital”, advirtió.
Luego de casi tres horas de generar caos vial, los inconformes esperaron a que algún representante del Gobierno capitalino los atendiera, para acordar fecha, hora y lugar sobre una mesa diálogo.
Ayer, dijeron, participaron alrededor de 2 mil representantes de las 45 organizaciones que integran la agrupación, al tiempo que ofrecieron disculpas a los capitalinos por las afectaciones que causaron, “pero esto nos obligan a hacer las autoridades, que insisten en que aceptemos sus caprichos sin escuchar”, dijo el representante.
Por la tarde la jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum, declaró que no cederán a las presiones de los transportistas y no otorgarán el incremento a la tarifa, al tiempo que la administración capitalina acusó al gremio de oponerse a la instalación de un sistema GPS, así como de videocámaras para mejorar la seguiridad al interior de las unidades.
Movilización. Desde las 7:00 horas de ayer, como lo anunciaron desde la semana pasada, alrededor de mil 380 transportistas marcharon desde cuatro diferentes puntos de la capital hasta la plancha del Zócalo, con la consigna de que las autoridades atiendan sus demandas, entre ellas: incremento de dos pesos al costo del pasaje, certeza jurídica, no a la tarjeta de prepago y la no incorporación como empresas.
La Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) local informó que durante las marchas los transportistas afectaron la vialidad, principalmente en siete arterias: Tlalpan, Constituyentes, Francisco Morazán, Barranca del Muerto, Revolución, Insurgentes y Paseo de la Reforma.
En tanto, el titular de la SSC, Jesús Orta Martínez, comentó que la vialidad con mayores problemas para la circulación fue calzada de Tlalpan; seguida de Constituyentes, de poniente a oriente, e Insurgentes, de norte a sur, las cuales fueron monitoreadas a través del C5 y C2.
