Al revisar un taxi cuyo conductor aceleró para intentar huir al ver una patrulla circulando cerca de él, policías descubrieron que, en el asiento del copiloto, llevaba el cadáver de una mujer.

Arturo Rivera, de 37 años, conducía un taxi blanco con rosa marca Hyundai, cerca de la pista de canotaje, en Tepepan, , cuando vio a una patrulla.

Aceleró para perderse, lo que hizo a los oficiales sospechar y pedirle que se detuviera.

Cadáver era de su pareja

Cuando los policías lo alcanzaron, bajó del auto y echó a correr, por lo que un oficial revisó el vehículo y vio un bulto tapado con una chamarra negra del que sobresalía un brazo.

Al detenerlo e interrogarlo, el conductor del taxi confesó que se trataba de su pareja, identificada como Andrea Victoria N.

Rivera dijo que tuvo una discusión con la mujer porque ella no aguantaba sus celos; posteriormente, la mujer de 33 años le dijo que quería separarse de él y se enojó a tal grado que la golpeó en varias ocasiones y la ahorcó con sus manos.

El crimen se cometió en el estacionamiento de un parque de diversiones en el Ajusco; luego, llevó al cuerpo a Cuemanco para lanzarlo a un canal, pero ahí fue detenido.

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