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Tultitlán, Méx.— Concluyó el año 2024 y las obras de ampliación del Suburbano, desde Lechería al Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA) siguen. El mayor avance se registra en la construcción de las estaciones Jaltocán, Nextlalpan, y Prados Sur, ubicadas antes de llegar a la terminal aérea. Quienes hacen uso del aeropuerto, sólo pueden llegar en taxi, auto particular o en Mexibús.
En un recorrido realizado por EL UNIVERSAL, trabajadores informaron que a partir de la segunda mitad del año comenzaron a laborar los días sábado y domingo a fin de acelerar el paso; sin embargo, factores como el presupuesto y protestas vecinales han frenado su conclusión.
El tramo donde inicia la desviación del Tren Suburbano al AIFA es en la actual estación Lechería, donde la instalación de la vía ya es visible, así como la catenaria que alimentará de energía eléctrica a los convoyes que pasen. Los habitantes de la colonia Ferrocarriles Nacionales ya se acostumbraron y otros de plano insisten en seguir cruzando por debajo del puente brincando la malla ciclónica en donde las autoridades ya colocaron letreros advirtiendo el riesgo eléctrico y de prohibición del paso por tratarse de una zona propiedad federal.
Ahí, al menos 10 familias habían quedado inconformes ante la modificación del paso del tren de carga, que también pasa por la zona, pues ahora tiene mayor cercanía con sus casas, recordando que intentaron demolerlas cuando comenzó la construcción del Suburbano-AIFA, hace tres años; mientras que el puente peatonal que les construyeron para cruzar sigue con las escaleras provisionales aun cuando ya fue concluido.
En las inmediaciones de la primera estación que tendrá por nombre Cueyamil, donde obreros siguen trabajando en el montaje de los paneles, ya fue instalada la malla ciclónica para impedir que cruce la gente desde la avenida Independencia hacia Recursos Hidráulicos.
“Hasta que no esté cerrado totalmente yo seguiré pasando por aquí. Ni nos dicen nada, aparte ese puente que construyeron queda bien lejos. Ya llevamos rato pidiendo uno y nos dicen que no hay presupuesto”, dijo Orlando Pineda, habitante de Bosques de Tultitlán.
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La edificación de la estación Cueyamil es de las que menos avance registra; sin embargo, la instalación de los durmientes y las vías ya es visible, al tiempo que las autoridades federales ya avanzaron con la colocación de la malla, por lo que automovilistas y unidades de transporte de carga ya no pueden cruzar por ahí, deben retornar y hacer fila cuando se registra tránsito lento en el Boulevard Tultitlán.
Como parte de las obras complementarias, hay un nuevo puente peatonal para que los vecinos de la colonia Lázaro Cárdenas puedan cruzar las vías del tren, estructura que no sólo es utilizada por peatones, sino por motociclistas que aprovechan que el puente está conformado por una serie de rampas.
Oposición vecinal
En el tramo de Tultepec hay dos estaciones cuyas construcciones se encuentran actualmente detenidas por una protesta vecinal. Se trata de Los Agaves y Teyahualco, que fueron frenadas en dos ocasiones durante el año pasado por habitantes del Ejido de Santiago Teyahualco, quienes afirmaron que el proyecto les ha traído repercusiones económicas por inundaciones, daños en viviendas, calles en mal estado por el paso de vehículos de carga y bajas ventas de comerciantes.
A mediados del mes de julio pararon las obras que reanudaron una semana después, comenzando agosto, al haber alcanzado acuerdos con el gobierno federal de la administración 2018-2024 para la pavimentación de vialidades dañadas como la avenida Recursos Hidráulicos y la Doctores, el pago de una indemnización a comerciantes, reparación de casas con grietas y la introducción de redes de drenaje.
No todos esos acuerdos que sostuvieron con la Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes (SICT) prosperaron y para noviembre decidieron frenar de nueva cuenta las labores de los obreros, lo que mantienen hasta la fecha esperando que se liberen recursos para los proyectos de la comunidad.
Jonathan García, colono de Teyahualco, explicó que él y sus vecinos, con quienes conforma campamentos para mantener la manifestación y el paro de obras, están de acuerdo con el Tren Suburbano al AIFA, ya que les traerá beneficios de movilidad. Sin embargo, son los daños que ha causado la obra lo que propició la protesta.
Otra obra complementaria donde hubo avances fue el puente vehicular que atraviesa el Circuito Exterior Mexiquense (CEM), ubicado a la altura de El Zacamole, infraestructura que ocasionó diversos cierres nocturnos del CEM para que se instalaran las ballenas.
Los puentes Lago de Guadalupe y Matamoros aún no se terminan, siguen en el proceso y para finales del año la Comisión Nacional del Agua (Conagua) intervino en esos dos puntos señalados con trabajos de mantenimiento y reubicación del acueducto Ramal Los Reyes-Ferrocarril, reconfiguración y conexión de dicho acueducto derivado del ramal ferroviario de pasajeros del Tren Suburbano que llegará al Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles.
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Avances
La estación de pasajeros 4 es de las más avanzadas y tendrá por nombre Prados Sur, en Tultitlán. La fachada ya está terminada del lado de la avenida Recursos Hidráulicos, faltando la cara que da a la vía de carga; las escaleras para los usuarios ya son visibles, reportando el personal que ahí ya hay un avance de 90%.
Además, el puente vehicular San Pablo ya está terminado y en funcionamiento para los automovilistas, circulando por un tramo de Recursos Hidráulicos recientemente pavimentada para permitir una mejor movilidad, hasta llegar a la estación Jaltocán, espacio cuyo avance también rebasa 90%, de acuerdo con los trabajadores del lugar.
La estación Nextlalpan ya luce la mayoría de los paneles de aluminio que cubren la infraestructura, además de ya portar los logotipos de Ferrocarriles Suburbanos. A esta última estación sólo se puede llegar a través del Circuito Exterior Mexiquense, pues las demás tienen acceso a través de la avenida Recursos Hidráulicos.
La única estación totalmente concluida es la localizada en la terminal AIFA.
Los usuarios y turistas que llegan a la terminal aérea pueden ver los letreros que guían hacia las vías, lo que no pueden hacer es utilizar el tren ante la falta de conclusión que aún persiste en este proyecto de transporte masivo de pasajeros.
