La Secretaría de Seguridad Ciudadana, en coordinación con la Procuraduría General de Justicia, realiza acciones contra la extorsión en establecimientos mercantiles en colonias como Condesa, Roma, Doctores, Morelos, Centro, entre otras, e incluso ha habido detenciones, aseguró su titular, Omar García Harfuch.

“Hemos tenido detenidos en diferentes zonas; estamos trabajando todos los días con un grupo antiextorsión de la mano de la procuraduría”, externó.

Explicó que no se necesita una denuncia como tal para comenzar a actuar, pues la SSC y la PGJ intervienen partiendo de las noticias criminales de gente que se acerca o llama a solicitar apoyo.

De acuerdo con los datos abiertos de la procuraduría, de enero a septiembre de 2019 se abrieron 835 carpetas de investigación por extorsión; las alcaldías más afectadas fueron Cuauhtémoc, con 143 carpetas; Iztapalapa, 116; Gustavo A. Madero, 92; Álvaro Obregón, 63, mientras que en Venustiano Carranza se iniciaron 56 carpetas.

El miércoles pasado el bar Caradura, ubicado en Nuevo León 73, en la colonia Condesa, alcaldía Cuauhtémoc, anunció en su cuenta de Twitter que cerrarían las puertas del establecimiento pues los actos de violencia y extorsión les impedían seguir operando de una manera que pudieran asegurar el bienestar de todas las personas que trabajan en el lugar.

Sobre el tema, García Harfuch indicó que no han tenido contacto con ese bar específicamente, o con algún encargado, pero que continúan trabajando con otros establecimientos y aseguró que no hay ningún indicio de que vaya a cerrar otro por esa situación en particular.

En tanto, la jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum Pardo, destacó que en el gabinete de seguridad se acordó que la procuraduría se va a poner en contacto con ellos para ver cuál es la razón por la cual cerraron y poderles dar atención en todo sentido, y “si es un caso que tiene que ver con delincuencia apoyarlos para que vuelvan a abrir el establecimiento”.

Sin embargo, reportes de la SSC capitalina informaron que el establecimiento cerró por un adeudo en la renta por 2 millones de pesos, aproximadamente, y destacó que la administración tomó la decisión de sellar la entrada del citado bar, así como el desalojar las instalaciones.

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